Capítulo 9

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Regulus y Genevieve Black habían comprado una casa en Godrics Hollow luego del cumpleaños número nueve de su hija, sabiendo que crecer rodeada de familia y sus hijos la ayudaría a ella, y al pequeño Taurus, a desarrollar una personalidad mas extro...

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Regulus y Genevieve Black habían comprado una casa en Godrics Hollow luego del cumpleaños número nueve de su hija, sabiendo que crecer rodeada de familia y sus hijos la ayudaría a ella, y al pequeño Taurus, a desarrollar una personalidad mas extrovertida y así adaptarse mejor a Hogwarts.

La casa era grande y muy hermosa pero cada vez que el primero de septiembre llegaba y sus hijos se subían a aquel tren, no podían evitar sentirse solos. Aunque ambos tenían amigos y trabajos en los que ocupar su tiempo, Regulus como jugador de quidditch profesional y Genevieve como diseñadora de modas de su propia tienda en Diagon Alley.

Genevieve jamás había pensado mucho en una carrera, siendo que ser una esposa y madre era lo único que se le había ofrecido como posibilidad desde niña. Pero cuándo terminó la guerra y todos los obstaculos que la frenaban desaparecieron, supo que tenía que hacer.

Agatha Doherty no era un ejemplo de ser humano para nada, a menudo era distante y cruel, pero Genevieve recordaba la luz en sus ojos cada vez que diseñaba y realizaba un vestido nuevo para ella y sus hermanas y había decidido cumplir su sueño por ella, para de una forma sentir que Agatha no había tenido un final tan trágico y que de algún modo la tenía cerca.

-Amor-habló Regulus desde la puerta de la cocina-los niños ya llegaron-dijo con una sonrisa.
-Aún no puedo creer que no quieran que los vayamos a buscar a la estación-dijo acercándose a él.
-Creo que ya no es "cool" que te vean con tus padres-bromeó.
-Yo pensé que éramos geniales-hizo una cara de tristeza en forma de broma.

Regulus soltó una carcajada y envolvió a su esposa en sus brazos, sosteniéndola con tanta fuerza y amor como siempre. Orion y Walburga Black habían fallecido hace tiempo y ninguno había hecho mucho por su felicidad, pero siempre agradecería que lo hubieran prometido a Genevieve. Ella era la única razón por la que había conseguido ser feliz.

Genevieve lo miró con amor desborando sus ojos y unió sus labios en un beso, sintiendo su estómago revolverse ante la emoción de besar al hombre que sería el amor de su vida hasta el día de su muerte. Ambos estaban perdidos en el beso así que no notaton a los tres adolescentes parados en el umbral de la puerta.

-Que asco-dijo Taurus luego de unos segundos.

Regulus y Genevieve se separaron rápidamente y corrieron a abrazar a sus hijos, felices de tenerlos con ellos de vuelta y deseando que el verano pase tan lento como sea posible. Daisy se apartó para observar la imagen, triste de que ella no pudiera tener una familia como aquella.

-Daisy, cariño-la saludó Genevieve-Geminis me dijo que vendrías a pasar el verano, ven aquí-dijo para luego envolverla en sus brazos.
-Hola tía-susurró con una sonrisa en los brazos de quien siempre había sido su tía favorita-Hola tío Regulus-dijo para luego abrazarlo a él.
-Pequeña Daisy-le devolvió el abrazo en forma de saludo-quiero que sepas que eres bienvenida a quedarte aquí el tiempo que quieras, ¿si?, siempre-le aseguró.
-Espero que mi madre cambie de opinión en algún momento-hizo una mueca.
-No he podido contactarme con ella-explicó Genevieve mientras los cinco caminaban y tomaban aciento en los sofás de la sala de estar-¿No fue a la estación con Sirius?
-No mamá-negó Geminis-y Sirius se fue con Lyra y Draco, dijo que pasaría el verano con ellos.
-Esto es muy raro-frunció el seño Regulus-mi hermano jamás se iría solo así con una mujer y dejaría a su hijo atrás.
-Talvez el tío Remus sepa algo-sugirió Taurus.
-Almorzaremos con ellos este fin de semana, allí hablaremos-declaró Genevieve-ahora, ¿cuáles son los planes para este verano?
-¡Oh!-exclamó Taurus-¡Es el mundial de quidditch!
-Lo sé-río Regulus-Inglaterra me ha pedido que juegue en su equipo.
-¡Papá!-exclamó Geminis-¡Eso es increíble, felicidades!

La slytherin saltó en brazos de su papá y el río abrazandola, jamás se acostumbraría a cuánto estaba creciendo su pequeña hija. Para él seguía siendo aquella bebe que había tomado en sus brazos por primera vez una noche de septiembre.

-Bueno, esa no es la única noticia-intervino Genevieve el momento.

La rubia se levantó del sofá para mirar fijamente a su familia. Regulus le dió una sonrisa de aliento, ya sabiendo lo que estaba por decir y emocionado por ver sus reacciones.

-¡Estoy embarazada!-se limitó a exclamar.

Los tres mas pequeños abrieron la boca de la impresión inmediatamente y saltaron de sus lugares emocionados, envolviendo a Genevieve y Regulus en abrazos y felicitaciones. Todos felices por el nuevo Black que llegaría muy pronto.

-¿Y cuándo nacerá?-preguntó Daisy con una sonrisa.
-En diciembre-contestó Gigi.
-Talvez estemos en casa cuando nazca-comentó Taurus emocionado.
-Dudo que quieran volver a casa las próximas navidades-comentó Regulus.
-¿De que hablas?-frunció el seño Geminis, sabiendo que ella siempre volvería a su casa en las vacaciones de navidad sin importar que.
-James dice que hay rumores en el ministerio de...-estaba por decir pero su esposa lo interrumpió.
-De cosas que se entetarán cuándo vuelvan a hogwarts-declaró.
-¡Mamá!-se quejó Taurus indignado-¡No pueden hacernos eso!
-Puedo hacer lo que quiera contigo porque yo te dí a luz-dijo seriamente.
-No discutas con la jefa, Tau-intervino Regulus con una sonrisa simpática-y vayan a cambiarse, la abuela vendrá a cenar.
-Espero que traiga regalos-comentó Taurus subiendo a su habitación.
-¡Taurus Arcturus Black!-lo regañó su madre por aquel comentario.
-¿Cuál será mi habitación?-preguntó Daisy.
-La habitación de huespedes junto a la de Gemi-respondió Regulus.
-Iré a instalarme, gracias por todo tíos-les sonrío para luego seguir a su primo.

Geminis miró a sus padres con una sonrisa, emocionada por todo lo que los siguientes meses traerían a su vida, el mundial de quidditch y un nuevo hermano o hermana.

-Los amo, ¿saben?-les dijo de repente-son los mejores padres-agregó, y luego salió en la misma dirección que Daisy y Taurus.

Regulus y Genevieve se miraron con una sonrisa y amor en sus ojos. Todo lo que pasaron valía la pena solo por ese momento.

GEMINIS [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora