Estaba dando vueltas en mi cama, no podía dormir. Acababa de tener una pesadilla.
Los acontecimientos de esa noche volvían a mi cabeza. Cada vez que cerraba los ojos veía la vida escaparse de los ojos de Will.
Suspiré.
<<No había sido nuestra culpa, no había sido nuestra culpa...>>
Pero si había sido nuestra culpa, en concreto la mía.
Intentaba repetirme eso siempre, pero no funcionaba.
Escuché un ruido que provenía de la cocina. Todos mis músculos se tensaron.
Yo vivía sola.
No lo pensé ni un segundo cuando abrí la ventana y salté por esta viendo únicamente una silueta negra entrando a mi habitación.