Desperté para darme cuenta que Gojo se había ido.
El reloj apuntaba las 10:50 de la mañana. Afortunadamente le había mandado un mensaje a Hotaru en el viaje en auto para que se encargara sola de la pastelería por hoy.
Me revolví entre mis sabanas, ya era relativamente tarde y yo aún me sentía cansada, creo que podría dormir todo el día. Pero mi estómago gruñía de nuevo, y no comer bien después de estar tan cerca de la muerte sería un pecado. Tengo que disfrutar mis comidas favoritas antes de que algo así ocurra de nuevo, y posiblemente logre matarme.
Me coloqué mis pantuflas, con cuidado de no lastimar mas mis pies. Tengo que cambiar las vendas de nuevo o se podrían infectar.
Al entrar a la cocina, un aroma dulce y ahumado invadió mi olfato; había algo en la mesa y me acerqué a ver qué era.
En un plato al centro de la mesa, estaban apilados 5 esponjosos hot cakes. La presentación era ciertamente desastrosa: la miel de maple estaba dispersada de una forma grotesca, en algunos lugares había demasiada y en otros casi nada. La mantequilla arriba del último hot cake ya estaba casi derretida, seguro la colocaron cuando el pan aún estaba caliente; y además, a un lado había lonchas de tocino, bastante achicharradas a decir verdad. Gojo me había hecho el desayuno antes de irse. Era un gesto muy dulce aún con todos los errores que tenía, pero me pregunto que tan cansada estaba que no lo escuché levantarse, cocinar e irse.
A un lado del platillo había una nota escrita a mano, la tomé y con una sutil sonrisa en mi rostro, leí su contenido:"Duermes como una piedra, ¿me pregunto si habrías dormido de esa manera si yo no hubiera estado aquí? Supuse que despertarías tarde y con hambre, así que hice mi mayor esfuerzo en hacer un desayuno que satisfaga a nuestra chef-repostera-pastelera-patissier. Disfrútalo.
P.D1: Éste es el número de Ijichi. Cuando tengas tus estudios de sangre llámalo para que te lleve a la escuela.
P.D2: Duermes tan profundo que te dejé un regalito, descúbrelo en el espejo más cercano~"—¿En el espejo?— Bajé la nota y caminé hacia el espejo en mi sala. —¡Gojo!— Exclamé cuando vi un "dormí abrazando a Gojo Satoru porque tenía miedo" escrito en la frente con plumón permanente. —¡Mataré a ese idiota cuando lo vea!— Afortunadamente leí la nota antes que otra cosa. Hubiera sido muy vergonzoso salir a la calle sin darme cuenta de que tenía el rostro pintado con plumón permanente.
Después de limpiarme el rostro (y desayunar) me dispuse a limpiar mis heridas para evitar que se infecten, y, mientras tanto, llamé por teléfono a Hotaru para asegurarme que todo estuviera en orden.
—¡Todo está de maravilla, jefa!— Su dulce voz sonó por el otro lado. —Pero tengo una duda, ¿desde cuando tenemos aire acondicionado en el almacén?— Su pregunta me desconcertó. En realidad, no hay aire acondicionado en el almacén. ¿Por qué un almacén lo necesitaría?
—¿Por qué lo preguntas?— Fruncí el ceño esperando su respuesta.
—Es que hace un momento fui al almacén por una mopa ya que un cliente tiró por accidente su café, y estaba helando. Por un momento creí que había entrado al refrigerador en su lugar, jajaja—
—¿H-Helando?— Un terrible presentimiento invadió mi cuerpo. El almacén era justo el lugar donde había sentido una maldición no hace mucho.
—¡Sí, helando! Por eso creí que le había puesto aire acondicionado al almacén— Hotaru sonaba nerviosa.
—Hotaru, por favor cierra la tienda y regresa a casa— No quería pensar en que otra maldición tal vez se había alojado ahí, y por supuesto no quería poner a Hotaru en peligro.
—¿Eh? Pero apenas es la 1pm— Habló confundida la chica al otro lado de la línea.
—Lo sé, cierra temprano. De todos modos no estoy ahí horneando nuevos lotes—
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Sweet Agony | Gojo Satoru
FanficSiempre había sido mi sueño heredar la pastelería de mis padres. La repostería me hacía enormemente feliz. El dulce aroma del pan horneándose, la sensación pegajosa al confitar almendras y nueces en caramelo, decorar las galletas en pedidos especia...