Capítulo 23

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ɴᴀʀʀᴀ ᴀɪɴᴀ:

Estuve inconsciente por varios días, cuándo desperté ya me encontraba en la taberna, Elizabeth me había puesto al tanto de la situación, me dijo que Ban me había dejado inconsciente siguiendo las órdenes de Merlín para que no siguiera perdiendo el control, pero eso no cambiaba el hecho de que Meliodas hubiera muerto

Desde que desperté he estado todos los días en el laboratorio de Merlín intentando buscar alguna forma de revivir a Meliodas, cuando no estaba en el laboratorio estaba en la habitación en donde se encontraba el cuerpo de Meliodas, me quedaba a su lado con la esperanza de que en algún momento abriera los ojos, no permitía que nadie más estuviera en la habitación de Meliodas o que durmieran con él

También últimamente he estado discutiendo mucho con Elizabeth, me reclama por no ayudar en la taberna y siempre es Hawk el que nos tiene que calmar, lo peor es que duermo con ella en la habitación. También una noche vino Zeldris a la taberna para saber cómo estaba y para disculparse, por más que quisiera odiarlo por lo que hizo se que no puedo, además odiarlo no traerá a Meliodas de vuelta

Ahora mismo estoy esperando a que Zeldris llegué para hacer nuestras pláticas nocturnas, al sentir que alguien me abrazaba me alarme un poco pero cuando me di cuenta que se trataba de Zeldris me tranquilice

Aina- me asustaste
Zeldris- lo siento mucho, y dime, que hiciste el día de hoy
Aina- pues lo mismo de siempre, estar todo el día en el laboratorio, discutir con Elizabeth, lo mismo de todos los días
Zeldris- deberías tomarte un tiempo para descansar, desde que despertaste no haz parado de esforzarte
Aina- no puedo parar hasta encontrar algún modo...

Al darme cuenta mis lágrimas habían vuelto, siempre que voy a visitar a Meliodas lo único que hago es llorar y esperar un milagro para que despierte

Aina- lo siento mucho...lo único que he hecho en todos estos días ha sido llorar, ahora mismo debo verme como una tonta, no?
Zeldris- claro que no, no vuelvas a decir esas cosas
Aina- muchas gracias Zeldris, sin Meliodas me sentía tan sola... incluso aún me siento así, pero con tu compañía ya no me siento tan sola
Zeldris- Aina...

Zeldris se acercó hasta mí y comenzó a limpiarme las lágrimas con mucha suavidad, se siente como si estuviera con Meliodas... Zeldris me miró con esos hermosos ojos verdes que el y Meliodas compartían, es como si Meliodas fuera el que estuviera frente a mi

Zeldris comenzó a acercarse cada vez más a mi hasta que me besó, era un beso muy dulce y tierno, mentiría si dijera que no me gustó, pero...no era Meliodas el que me estaba besando el estaba muerto y eso no cambiaría, amo mucho a Zeldris y por eso mismo no quiero ilusionarlo ni romperle el corazón, por qué yo siempre he amado y siempre amaré a Meliodas

Rápidamente me separé de Zeldris esté estaba sonrojado y apenado

Zeldris- Aina, yo...
Aina- tranquilo Zeldris, se que no lo hiciste con malas intenciones, pero...
Zeldris- no tienes que decírmelo, se que por más que me esfuerce tú siempre seguirás amando a Meliodas
Aina- me alegra que lo entiendas, por qué no me gustaría perderte ni a ti ni a tu amistad. Estoy segura de que en algún lugar del mundo hay una persona que te ama profundamente
Zeldris- pero yo te amo a ti
Aina- yo también te amo Zeldris, pero debes conocer a otras personas, estoy segura de que te enamoraras mucho más de otra chica
Zeldris- puede ser... pero de todas formas no me daré por vencido, seguiré intentando protegerte y si es un milagro conquistarte!
Aina- pero que terco eres pequeño Zeldris!

Seguimos con nuestra plática nocturna, me alegra que después de ese beso sigamos siendo mejores amigos

Aina- Zeldris, te importaría responderme unas preguntas?
Zeldris- dime, que dudas tienes?
Aina- como es eso de que Meliodas era el líder de los diez mandamientos? Y si en verdad era así, desde hace cuánto tiempo lo conozco? Desde hace cuánto tiempo qué tú y yo nos conocemos?
Zeldris- ya está amaneciendo, lo mejor será que me vaya
Aina- pero...
Zeldris- tranquila, no necesitas saber todo eso

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