Debate Club [l.s] [AU]

I

La bañera estaba quieta. Louis estaba sumergido, era algo que le gustaba hacer, lo calmabaa, lo hacía desaparecer un momento, y era justo lo que necesitaba, era el primer día de el primer año de la universidad.
Sacó la cabeza para tomar aire, era muy temprano en la mañana así que se dirigió a su cuarto a ponerse lo que tenía preparado para ese día, se lavó los dientes antes de salir a su habitación y se acomodó el cabello. Una vez listo en su cuarto se detuvo a verse en el espejo por un largo momento, aún le parecía increíble ir a la universidad cuando hubo un tiempo que lo veía imposible, recordaba estar en la oficina del director por tercera vez en la semana, por razones que a ninguno de los dos le resultaban extrañas: había discutido con algún profesor.
—Louis, deja de hacerte esto.- le dijo el director.
—¿El que? ¿Alzar la voz contra lo que no es justo? Vamos, no podía quedarme escuchando la mierda que decía.
—Vocabulario, Tomlinson.- Lo miró antes de seguir.— Ese es el motivo por el que debes dejar de discutir con ellos.- suspiró.— Tú eres un chico listo, tus notas son impecables, pero sobre todo eso, eres justo y tienes un ferviente espíritu de lucha. Puedes cambiar el mundo, sabes que es así, y por eso necesito que dejes de discutir con tus maestros, no lo valen.
Louis lo miró confundido.
– No puedo ayudarte mucho más tiempo, Louis, estas a pocos puntos de que te tenga que expulsar por comportamiento.
— ¡¿Cómo?! ¡No! Yo solo,
— Querías hacer lo correcto, lo entiendo pero gritarle a los mayores no es la manera.
El adulto lo miró con compasión y el chico pareció entenderlo.
— Sí, puede que sea cierto.— sabía que lo era.
— ¿Ya sabes a que universidad irás?
— No se si quiero ir...
— Ya, con tus notas podrías entrar a la que tú desees, y si logras no visitarme hasta el fin del curso tu conducta no será lo que te frene.— alzó la mirada para encontrar a un Louis expectante al que de repente se le borró toda ilusión del rostro.
— No he visto ninguna escuela...
— Aún tienes tiempo y mira, pensaba darte esto.— se agachó a abrir un cajón a sacar una carpeta con folletos y aplicaciones para universidades.— Pero esta sería mi recomendación primaria.— Louis miró el folleto y el director vio la ilusión en sus ojos al tiempo que pronunciaba lo que sabía que podía hacerlo cambiar de opinión.— tienen un club de debate.

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Se rió un poco antes de tomar su mochila y caminar hacia su cocina, tomar un plato, agregar cereal y leche, lo terminó y estaba por tomar sus llaves y salir cuando su madre lo alcanzó en un abrazo, Louis se giró a devolverlo.
— Suerte en la escuela bebé.
— Mamá tengo 19 ya.— Lo miró sonrojado.
— ¿Y qué? Eres mi bebé.— le dio un beso en la mejilla y lo dejó ir.
El chico tomó sus llaves y salió a su auto, mientras manejaba a la universidad admiraba Londres, el día estaba templado y todo apuntaba a que nada podría salir mal.
Llegó a la escuela, y la admiró, era enorme, y aunque claro que le emocionaba estudiar leyes, le interesaba más el club de debate, pensaba que le ayudaría con su profesión aunque en el fondo, sabía que lo hacía por el placer de discutir, claro, desde la diplomacia... la mayor parte de las veces.
Se encontraba caminando hacia el auditorio de la escuela para la bienvenida general, estarían alumnos de nuevo ingreso de varias facultades, y no conocía a nadie, su mejor amigo Liam estudiaba en otra universidad, así que realmente estaba solo ahí, ¿o no? Al mirar hacia enfrente de donde el estaba, había un chico, sentado exactamente al otro lado del auditorio, conocía esa figura, ese cabello y esos ojos, no podía creerlo, no aquí, justo cuando creía estar empezando de cero tenía que estar aquel chico. Harry.

Lo conocía de nombre solamente, habían coincidido en cada escuela que estuvieron, pero bueno, Londres no es muy grande a decir verdad, pero ese chico era muy inteligente, constantemente estaba en el cuadro de honor, desde el preescolar hasta la preparatoria, al mismo nivel que Louis, solo que aquel rizado sabía mantener mejor el comportamiento, y eso hacía enojar al indisciplinado, incluso si nunca habían cruzado palabra más allá de un "felicidades" en ceremonias oficiales, sabía que no le agradaba mucho. No podían estar en la misma carrera, había escuchado en algún lugar que el más alto entraría a arquitectura y en cierto modo lo tranquilizó, tal vez sí podía estar en un lugar nuevo y no prestarle atención al chico. Nunca habían competido directamente pues no compartían aula pero tenía siempre la sensación de tener que vencerlo y a veces en la mirada del rizado había un destello de que era mutuo e incluso algunas veces hasta se sentía retado por aquellos ojos y eso lograba molestarlo, pero le encantaba competir.
— Bienvenidos, jóvenes. Esta institución les confía la creación de un nuevo futuro en sociedad. Se esperan grandes cosas de ustedes y tengo la certeza de que no nos defraudarán. — Una voz surgió desde el círculo central del auditorio y detrás de lo que parecía ser el decano apareció una imagen con las letras deletreando "bienvenidos".— la Universidad Leafde les abre las puertas.

Hubo aplausos, y Louis estaba mirando el escudo de la universidad, era una rosa y le parecía adecuado, no entendía porque y tampoco quería profundizar mucho en ese pensamiento así que caminó hacia su aula, mientras caminaba observaba el paisaje, los edificios de las distintas facultades y lo elegantes que eran, todo se veía caro para ser una escuela pública. En cada edificio arriba de sus leyendas en latín estaba el escudo de la universidad y el nombre de la facultad, vio Medicina, Ingenierías y Arquitectura. Le agradecía a Dios que su facultad estuviera lejos de la de aquel chico, aunque había probabilidades de verlo en la cafetería, dudaba mucho que sus horarios coincidieran para comer. Entonces vio en letras grandes en un edificio blanco la palabra "Derecho" y sintió como cada fibra de su ser se llenaba de emoción, entró sonriendo, mirando cada detalle, se sentía un explorador de su facultad.
Tomó cada clase con atención, escuchando y admirando a los maestros, haciendo notas de lo que el consideraba importante y se sorprendió de sí mismo, desconocía esta faceta suya pues estaba acostumbrado a un Louis que no le importaba nada. Pero sabía que esto no podía no importarle, se trataba de su futuro y no creía que le fuera a encantar tanto esa idea, prometió ser lo mejor posible, en todos los aspectos.

En un momento libre caminó cerca del auditorio, vio los stands de los diferentes clubs, había arte, cine, literatura, teatro, danza, fútbol y debate. Sus ojos comenzaron a brillar al verlo, aunque para su sorpresa era el stand más pobre en gente interesada, vio una chica que parecía querer saber más, pero esta se fue rápidamente. Se paró frente a la mesita blanca con el cartel tan elaborado que tenia y globos alrededor, vio a un chico sentado ahí, era moreno, con el cabello negro y un poco largo, tenía rasgos finos, era muy apuesto, el chico se levantó y Louis vio que era más bajito que el moreno, aunque no por mucho, era casi imperceptible si no estaba parado frente a él.
— Hola, tu cara no me suena, debes ser de nuevo ingreso, soy Zayn, Zayn Malik. Soy el presidente del club de debate.- le extendió la mano para saludarlo y Louis la tomó y sacudió.
— Louis, Louis Tomlinson.
— Muy bien Tomlinson, ¿asumo que te interesa unirte a nuestro club?— le dijo sonriente.
— Yo- ... si.- tartamudeó.
— Excelente elección, lo valoramos mucho, aunque entre tú y yo.— bajó la voz.— Es el mejor de todos.— rió un poco, haciendo reír a Louis.— Pero tienes que saber que no es un club fácil, necesitas fuerza, espíritu deportivo, sacrificio y sangre.— lo miró serio.— Es broma, la sangre es opcional.— le dijo después de ver la sorpresa en el rostro del menor y rió.— ¿En que carrera vas?
— Derecho.
— Ahhh tenemos a un entusiasta, bueno, probablemente te ayude en algo, pero no será tan parecido como tú esperas.- le dijo el moreno.
— No tengo ninguna expectativa de que se relacione con mi carrera, me gusta debatir, es todo.— le sonrió.
Zayn sonrió de manera genuina.
— Me agradas.— le pasó una hoja y un bolígrafo.— Firma tu sentencia de muerte, es decir, tu registro.— dijo en tono juguetón mientras le devolvía la sonrisa.
Era gracioso, pensó que si Liam conociera a Zayn, serían buenos amigos, compartían ese sentido del humor que era difícil que saliera de una persona sin parecer forzado. A ellos les resultaba natural.
Llenó la forma y la entregó.
— Muy bien Tomlinson, te veré en la presentación de hoy. 2:00 pm, nos vemos en la biblioteca.
— Ahí estaré.
Tomó el resto de clases que le quedaban, emocionado por llegar al club, así que ni bien terminó de hablar su profesor salió casi corriendo a la biblioteca, abrió la puerta y ahí estaba, una figura conocida, que no apreciaba del todo. ¿Qué demonios hacía ahí?
— Oh no.
— Louis Tomlinson.— dijo con tono familiar, reconocería esa voz donde fuera aunque la hubiese oído menos de 10 veces en la vida.
— Harry Styles.— le contestó y el rizado sonrió retador.
— Se conocen, excelente. Pueden charlar luego.— los interrumpió Zayn.
Louis rodó los ojos y se sentó lo más lejos que pudo de Harry.
Zayn soltó dramáticamente unos libros en la mesa mientras alzaba la cara y sonreía para pronunciar casi teatralmente.
— Bienvenidos al club de debate.