-¿Que hacías en la oficina del super? -pregunto el de cresta mientras subian nuevamente a la patrulla.-Me ayudo a procesar al detenido.
-A vale...-el pelirrojo condujo mientras evitaba reirse, apenas el rubio habia salido de la oficina del superior un fuerte olor a chocolate habia escapado del lugar y sabia muy bien las intenciones que había tenido su hermano al dejar salir aquel aroma.
Sus pensamientos fueron interrumpidps por el tono de llamada del rubio.
"Gustabo! ¿Pero que pasó que nunca más volvieron a trabajar?" hablo el gallego tras el celular.
Horacio freno de golpe y miro a su hermano sorprendido.
Nunca habian renunciado, simplemente dejaron de ir, olvidando por completo a Segismundo.
-Ostia...Segis...conseguimos otro trabajo -rio nervioso el rubio- que somos ma...- fue interrumpido.
"Coño! Pues haber avisado! Venga los dejo tranquilos! Adios!" y sin esperar respuesta colgó dejando con la palabra al oji azul.
-Algo me dice que lo encontraremos en un atraco...como el atracador- solto una risa Horacio, en lo poco que lo habian conocido se dieron cuenta que este no le tenia miedo a las autoridades y mucho menos a cometer uno que otro delito.
[•••]
El resto del dia fue tranquilo de cierto modo, estaban apunto de salir del servicio pero antes tenían que quitarse el uniforme.
-Te espero afuera perla! -con una sonrisa de niño pequeño salió feliz del lugar, dejando dentro a su hermano que terminaba de cambiarse.
Segundos despues la puerta de los vestuarios volvio a ser abierta.
-¿Que hicieron para aprobar las oposiciones? ¿Acaso tuvieron sexo con el Superintendente? Es imposible que unos Omegas hallan sido capaces de pasar las pruebas -con un tono arrogante y burlón Brown rio por su propio comentario.
-¿Que pasa Brownie no eres capaz de aceptar que dos "Omegas" son mejores que tu? -sin ni siquiera voltear a verlo le respondió haciendo comillas con sus dedos.
La habitacion de lleno de un asqueroso y amargo olor a Cenizas, el alfa a paso rápido se acerco al omega, bruscamente lo giro para que lo mirara y con toda su fuerza lo empujo contra los casilleros, agarrandolo fuertemente del cuello para que el rubio no se moviera.
-Escuchame atento, los omegas no sirven para nada que no sea tener cachorros, luego de eso son completamente inutiles y ustedes no seran la excepción, no durarán ni un mes, yo me asegurare de eso.
El rubio, quien aun se mantenia tranquilo con toda esa situación, se mantuvo en silencio, no era la primara vez que le decían inútil, pero ahora todo era diferente, no dejaría que le digan lo que podia o no hacer.
Mostró una sonrisa divertida para luego escupirle al castaño haciendo que asqueado se alejara.
-¡Hijo de Pu...-se quedo perplejo cuando una arma le apunto directo en la cabeza.
-¿Que pasa Brownie? ¿Te quedaste sin palabras? Como me vuelvas a llamar inutil no me voy a quedar con las ganas de meterte un puto tiro- bajo el arma y se dirigió a la puerta, saliendo por esta dejando aun molesto y asustado alfa.
Justo cuando salió se encontró con Conway quien justo iba a entrar a los vestuarios por el ruido que habia salido del lugar.
-¿Que coño paso ahí dentro?
-Brownie siendo Brownie, tranquilo ya lo arregle -siguiendo su camino tan sólo le mostro su arma para hacerle entender como habia arreglado el asunto.
-Vale...-el de gafas entró en el vestuario a la par que sacaba la porra, estaba más que claro lo que pasaria allí dentro.
[•••]
El de cresta manejaba en silencio, evitaba preguntar el porque de la demora de su hermano aunque era obvio gracias al olor a cenizas que tenia pegado y el notorio olor a chocolate amargó.
Intentando relajar el ambiente prendió la radio y puso una estación al azar, la canción comenzo a sonar ganando la atención del rubio y el pelirrojo.
-¡LA TUSA! ¡LA TUSA! -grito el rubio alzandole más el volumen y comenzar a cantar a todo pulmón, Horacio, quien no se quedaria atrás lo imitó.
[•••]
~12:43 pm~
Siendo acompañado por el silencio de la noche un alfa caminaba directo a la oficina de su jefe, traía una máscara completamente negra, se acerco a los dos hombres armando que cuidaban la puerta.
-El jefe Calavera pidió verme- los hombres se miraron entre sí para luego regresar su mirada al alfa y apuntarle- Mierda, ¿Enserio haran esto cada vez? Soy yo! -alzo un poco su mascara para dejarse ver, los hombres le abrieron la puerta para dejarlo entrar.
Entró a paso rapido escuchando como cerraban la puerta detrás de el, se acerco al gran escritorio que habia en la oficina dejando sobre esta su mascara.
-Agradezco tu puntualidad, pero veo que haz tenido un dia difícil -hablo neutral el señor traz el escritorio, el cual traia una máscara de calavera dando honor a su apodo.
-Ha sido una tarde...complicada-
-¿Tienes alguna información para mi, Agente Brown?
-Si, señor, Hoy han entrado dos agentes nuevo, dos omegas.
-¿Omegas?
-Correcto, se dice que tienen alguna relación con Conway pero aun no se exactamente cual.
-Averigualo, no vengas hasta que no me traigas esa información.
-Si, señor...
Simplemente...el inicio del caos...
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Xavier Brown: Alfa de 27 años con olor a cenizas.
Calavera: [Desconocido]
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𝓓𝓾𝓵𝓬𝓮 𝔂 𝓐𝓶𝓪𝓻𝓰𝓸 [𝓘𝓷𝓽𝓮𝓷𝓪𝓫𝓸] [𝓞𝓶𝓮𝓰𝓪𝓿𝓮𝓻𝓼𝓮]
RomanceCafe y chocolate Dulce y amargo Jefe y empleado Completamente diferentes y a la vez tan iguales. Un omega que vivia una vida simple y sin preocuparse por nada, no se metia en problemas pero tan poco era un santo. Y un alfa que tenia toda una ciudad...