Mi Pequeña Familia || Chanchang

CAPITULO 20

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Changbin corría hacia el mar, con su pequeña hermana en brazos y los gemelos detrás tomados de la mano de su madre. Mientras el pequeño Jisung dormía plácidamente, gracias a la exquisita brisa marina. El verano les regalaba un hermoso día y lo habían aprovechado al máximo.

Cuando Chan se vio solo sentado junto al señor Seo, vio la oportunidad que había estado esperando. Quería hablar a solas con él, pero no había tenido la oportunidad en la noche, ya que su Binnie, no se había despegado ni un segundo de él, tal vez intuyendo que su novio se traía algo entre manos. Y a pesar que la noche fue larga en conversación, juegos y hasta un poco de televisión, no hubo ni un momento en que quedaran a solas. Menos mal que Changbin esa noche sólo ansiaba que su Channie lo acariciara y le diera besitos tiernos hasta que se durmiera, porque se sentía muy agotado. Y eso fue justamente lo que sucedió.

—Yo no tuve que hablar con mis suegros, eso fue muy bueno...—Seo Hyuk le hacía ese comentario a Chan, intuyendo que su yerno, cinco años menor que él, quería hablarle --ellos echaron a Yerin cuando supieron que estaba esperando a Changbin. Hasta el día de hoy no la aceptan del todo, tampoco a su nieto y menos a mí. Pero no me importa demasiado y creo que a ellos tampoco. Mis padres han sabido llenar esos espacios.

—Lo sé. Binnie me ha contado toda su historia y es muy hermosa. La relación de ustedes dos es muy hermosa, espero que algún día Jisung sienta lo mismo por mí y por Changbin.

—Estoy seguro. Mi Binnie es un hombre extraordinario y eso que aún es un poco inmaduro. Tal vez yo lo malcrié los pocos años que alcancé a vivir con él. Pero es que sentía que necesitaba tanto amor. Pobre, pasaba todo el día solo, pues Yerin debía trabajar y estudiar. Pero eso le sirvió para vivir solo en Seúl y se ha fortalecido. Y prueba de ello, es que está contigo.

—Yo le agradezco como me han recibido y a Jisung...realmente no lo esperaba. Y sé que para usted puede ser un poco difícil escuchar esto, pero yo amo a su hijo, estoy enamorado de él y mi amor es serio y sin dudas.

—No me molesta Chan. Cuando mi hijo me dijo entre lágrimas que era homosexual, lo único que hice fue abrazarlo. Nada cambió para mí, sólo mi temor cuando iba creciendo y salía...temía que algún imbécil homofóbico lo golpeara o lo atacaran. Pero lo amo y no me importa si le gustan los hombres. Me encanta verlo feliz contigo, tomados de la mano, buscando tu amor, tus abrazos. Lo entiendo perfectamente. Yerin y yo nos amamos de la misma manera y no veo la diferencia.

Chan respiró profundamente. Sus padres tampoco jamás lo habían juzgado, a pesar de que sabía que les había causado una honda tristeza y decepción y a pesar que su madre insistía con que debería casarse con una mujer, estaba seguro que a la larga iba a amar a Changbin y ya no se opondría más. Eran afortunados.

Un silencio se produjo y Chan volvió a respirar, para darse valor a lo que tenía que decir y pedir. Él aún no había hablado una palabra del tema con Changbin, pero sentía que lo correcto, era primero hablarlo con el señor Seo.

—Quiero que Changbin viva conmigo y aunque aún no se lo he dicho y no sé si va a aceptar, necesito saber si usted y su esposa, están de acuerdo. Sé que aún le queda un año de universidad y que usted cubre sus gastos y por supuesto que me haré cargo de todo eso. Tengo una casa, está vacía ahora y un poco lejos de la universidad, pero lo podemos arreglar...

El padre de Changbin sonrió. Él lo sabía. Apenas había conocido a Yerin y en cuanto se dio cuenta que Changbin no lo rechazaba, le había propuesto casarse y darle el apellido a su hijo. Ella lo consultó con él y ambos aceptaron. Formaron su familia muy rápidamente y ahora se daban cuenta que no se habían equivocado.