001 || El ataque a Oblitus

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Inicio de Primavera
2 de la Primavera del 5021 D.C.D

Ascian

Gigantes y enormes monstruos sangrientos es lo único que me rodea. Gritos de miedo, sufrimiento y dolor es lo único que se oye. Una masacre. Esto es una masacre.

Mavka ha atacado la Plaza Central de Oblitus, el único hogar que he tenido por estos casi 500 años, y está siendo destruido por esas repugnantes criaturas con sed de sangre.

Corro y corro. Desde el momento en el que vi a Cronos ser apuñalado por la espalda por uno de esos monstruos he salido a buscar a Alastair. No se que haría si él terminara muerto. No quiero volver a quedarme solo.

Así que corro y corro. Esquivo y asesino a cualquier ser viviente maligno que se me cruce por el camino. Nada ni nadie me va a impedir llegar hasta mi mejor amigo; la primera persona que se ha quedado en mi vida, a pesar de ser un humano y tener 34 años, han sido los mejores de mi vida.

Visualizo a lo lejos esa cabaña que consideramos nuestro hogar, como se levanta mientras me voy acercando mucho más. Comienzo a acelerar mi carrera hasta que por fin llego. Entro a la choza rápidamente antes de que nos ataquen.

Veo hacia los lados buscándolo. No está en la cocina, no se encuentra en la sala. En los baños tampoco hasta que entro en la habitación y lo observo moverse hábilmente guardando algunas cosas en un bolso.

—¿Qué estás haciendo?—le pregunto, haciendo que se sobresalte. Me mira por un segundo para luego continuar con lo que estaba haciendo.

—¿En serio me lo preguntas?—inquiere indignado, sin dejar de caminar por la habitación.

—Sí, en serio lo pregunto. Hay monstruos afuera que pueden entrar en cualquier momento y matarte, y tú—lo señalo—estas aquí haciendo cualquier mierda.—finalizo alterado.

—No seas exagerado, no estoy haciendo cualquier mierda—me imita—Estoy buscando lo necesario para irnos de Oblitus. Deberías hacerlo también y ayudarme, porque ni loco me quedo para ser asesinado, tampoco te voy a dejar a ti.

—¿Qué? ¡No!—retrocedo un paso como si eso evitara lo inevitable—Yo no me voy a ir. Alastair, nuestra comunidad nos necesita. Hay personas inocentes muriendo allá afuera por esas horribles cosas.—tanteo y me mira dejando por un momento lo que estaba haciendo—Nos necesitan Alastair.

Me mira detenidamente, y suspira resignado negando con la cabeza—Te odio tanto—sonrío. Se acerca a mí y me palmea el hombro con una media sonrisa—Vayamos a matar a esos infelices.

Tomamos nuestras armas y nos posicionamos uno al lado del otro al frente de la puerta, que nos dirigiría hacia, literalmente, la muerte. No me importa morir, pero si lo voy a hacer prefiero hacerlo salvando a personas.

—Hagamos esto, amigo—dice Alastair y asiento para luego abrir la puerta de una patada.

—Sé que estás molesto pero no te desquites con la puerta. Amo esta casa, así que no la dañes—dice, indignado. Ruedo los ojos y me dispongo a salir por la puerta.

Afuera es un desastre. Hay sangre por doquier. Las personas corren de un lado a otro llorando y gritando, protegiendo a sus hijos y tratando de sobrevivir a esta invasión. Las criaturas se percatan de nuestra aparición y comienzan a aproximarse. Es aquí donde comienzo a moverme.

Esquivo, tacleo, apuñalo y asesino mientras avanzo hasta donde se encuentra la reina. Volteo hacia los lados y no veo a Alastair por ningún lado. Retrocedo por las calles buscándolo hasta que lo veo. Está peleando contra un Demon, una criatura voladora con grandes alas, dientes afilados y brillantes escamas de color negro.

Entre la Luz y la Oscuridad © (EN PROCESO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora