3 de marzo 2020
No, hoy no he ido a bailar ni tampoco hay gente. Creo que solo me estoy matando por dentro. Pasé la noche con una casi completa extraña, como si eso fuera a devolverme el amor propio. No sé ni lo que hago pero por acá no es.
Siento que la intensidad del dolor me hace perder en un bosque sin fin, y cuanto más me esfuerzo en encontrar una luz, más me pierdo.
Por suerte ya falta poco para comenzar las clases, eso me mantendrá alejada de las pavadas que estoy haciendo.
Hoy, mientras me iba de la casa de la desconocida, vi una cucaracha dada vuelta, se debe haber caído de la pared. La iba a ayudar pero les tengo una fobia terrible.
―¿Te veo en una semana? ―me preguntó toda despeinada.
Miré la cucaracha con pavor antes de responderle.
―¿Una semana?
―Las clases... compartimos edificio.
Me tomó por sorpresa en el momento. Y la verdad es que me preocupa saber que es otro problema que deberé enfrentar. Me gusta, no puedo mentir, pero me dejó en claro que no quiere otra cosa que no sea sexo, y yo no sirvo para ese tipo de relaciones. No sirvo para ninguna, creo.Al menos por un tiempo sé que será un martirio tener que verla por allí. Con el paso de los días se convertirá en alguien más, cuyo pasado coincidió breve y fugazmente con el mío.
Esto es lo bueno de terminar un intento en el momento justo: el dolor es soportable y corto. Pronto será un recuerdo.
ESTÁS LEYENDO
Alétheia
Mystery / ThrillerHistorias, todos tenemos historias que han quedado secuestradas por la eternidad en nuestro corazón. Esperan, arrinconadas entre recovecos añejos, que algún alma viajera frene en su estación; muchas golpean con vehemencia las paredes y pareciera qu...