Anthology

Capítulo 16 : Cosas favoritas

"¿Alguna vez te he hablado de tus ojos?"

Hubo un largo suspiro.

"Sí. Varias veces ahora ".

"Son tan marrones... Chocolate con miel. Ámbar puro a la luz del sol. Se iluminan como si tuvieran estrellas cuando estás feliz ". Draco dio un largo y profundo suspiro. "Los amo. Adóralos, de verdad. Mataría a un hombre por tus ojos ".

"Sí. Mencionaste eso antes cuando vine a buscarte al bar ".

"Y tu cabello..." se agarró a un poste de luz con una mano y procedió a balancearlo y girarlo. "Solía ​​pensar que era espantoso. Como un nido de cachorros. A veces —su voz se redujo a un susurro escénico tan fuerte que rebotó en los edificios—, creo que es sensible.

Volvió a girar alrededor del poste de luz antes de enderezarse vacilante.

Pero tu cabello también me ha crecido. Pucey hizo un comentario al respecto la semana pasada, y he maldecido a ese bastardo con tanta fuerza que sus descendientes tendrán furúnculos ". Se burló por un momento antes de que su expresión se transformara en una sonrisa de suficiencia.

"Enséñale a ese maldito idiota a decir una palabra sobre mi novia". Hizo una profunda reverencia desde la cintura y casi chocó contra el pavimento.

Hermione lo agarró por la bufanda y lo estiró, agarrándolo por la cintura.

"Sí. Estoy seguro de que te sentiste muy caballeroso ". Su voz era seca.

Él asintió pesadamente, envolviendo su brazo con fuerza alrededor de sus hombros y levantándose. "Yo soy un caballero."

Hubo una pausa.

"Intento ... ser un caballero". Su voz tembló.

Ella miró hacia arriba bruscamente y lo encontró mirándola, sus ojos eran grandes y luminosos, y comenzaban a nadar. Le temblaba la mandíbula.

"Dios, Granger," su voz se quebró, "lamento mucho todo lo que hice en la escuela, cómo te traté, sé que probablemente nunca podrás perdonarme".

Ella lo interrumpió abruptamente. "¿Qué piensas de mis oídos?"

Parpadeó, luciendo confundido y distraído. "¿Tus orejas?"

"Sí. ¿Qué piensas de ellos?" Ella lo acompañó rápidamente por la calle mientras hablaba. "Me pregunto si tal vez sean un poco demasiado grandes".

"¡No! Tus oídos son perfectos. Como pequeñas conchas marinas rosadas. Pero... "su voz era ruidosamente conspiradora," lo que más me gusta de ti ", se volvía más fuerte con cada palabra cuando doblaban la esquina," a pesar de lo mucho que amo tus ojos y tus oídos, ¿son los pequeños ruidos que haces cuando lamo? tu cu— "

Ella apretó su mano firmemente sobre su boca y la mantuvo allí hasta que su mandíbula dejó de moverse. Ella lo fulminó con la mirada mientras apartaba la mano.

"¿Quieres callarte, imbécil?" Su rostro estaba visiblemente escarlata incluso a la luz de la luna.

"Grosero", murmuró en voz baja. "Maleducado. Maleducado."

Se apartó de ella malhumorado, caminando hacia una pared y procediendo a deslizarse por ella y sentarse en el pavimento húmedo, cerrando los ojos.

Hermione gimió y lo sacudió, tratando de ponerlo de pie. "No, no, no te quedes conmigo. No cierres los ojos ".

Déjame en paz, bruja. Estoy tomado ", dijo. Su voz se entrecortó profundamente y se hundió aún más.

Hermione empezó a meter la mano en su chaqueta, pero se detuvo y miró por encima del hombro. Una matrona los miraba con desaprobación a través de las cortinas de su casa. Hermione retiró su mano con un suspiro.

"Vamos." Ella gruñó y casi se cae hacia atrás mientras lo levantaba del suelo.

Su cabeza se inclinó hacia adelante y se apoyó pesadamente contra ella, casi doblándola cuando ella tropezó por la calle pasando por tres casas más y luego lo arrastró laboriosamente por los escalones hasta la puerta principal.

"Aquí estamos." Su voz estaba sin aliento cuando sacó una llave y cayeron por la puerta.

Ella se quedó jadeando durante varios segundos y luego lo apartó del camino y cerró la puerta de una patada antes de sacar su varita. Ella lo movió y con cuidado hizo levitar su cuerpo inerte por las escaleras hasta el dormitorio. Retiró el edredón, lo dejó caer sobre la cama, le quitó los zapatos, le quitó la corbata y lo arropó con cuidado.

Fue al baño para cepillarse los dientes y ponerse el pijama antes de meterse a su lado, acurrucándose contra su hombro. Su brazo inmediatamente se movió y la envolvió.

Levantó la cabeza y apoyó la mano en su pecho mientras lo besaba castamente en los labios.

Los ojos de Draco se abrieron instantáneamente y retiró su brazo con un tirón, casi cayéndose de la cama.

Hermione se sentó y vio como él se sentaba rápidamente, agarrando su almohada y sosteniéndola contra su pecho mientras se levantaba. Miró alrededor del dormitorio y corrió hacia la alfombra del otro lado. Miró de arriba abajo por el suelo y finalmente dejó caer la almohada en una esquina y procedió a acostarse allí, acomodando la almohada debajo de su cabeza y cerrando los ojos.

Hermione lo miró durante varios segundos antes de finalmente hablar. "Draco... ¿qué estás haciendo? Regresa a la cama. ¿No vas a dormir conmigo?

Abrió los ojos y la miró adormilado desde el otro lado de la habitación. Sacudió la cabeza con tanta firmeza que sus hombros se balanceaban con cada movimiento. "No. Seguro que eres una persona muy agradable, pero tengo novia. No lo estoy jodiendo. No para nadie ".

Volvió a cerrar los ojos y se durmió.