Salí del salón hacia mi casillero, y no tardé en encontrarme con Kevin, quien me había comprado un regalo.
-¿Que esto?- pregunté confundida.
-Un regalo para ti niña hermosa- dijo pellizcando mi nariz.
Lo abrí cuidadosamente, metí la mano para ver que era: una entrada al cine y un collar con una esmeralda que se veía muy costosa.
-¡Pero esto es muy costoso!-dije exaltada -¿por qué me lo compraste?
-De nada- me tomó por la cintura -quiero que lo uses el viernes en la gala de los bomberos que organizarán mis padres.
-¿Es eso una invitación a una cita?- dije yo algo nerviosa.
-Sí, quiero que seas mi pareja en la gala- besó mi mejilla -¿qué dices?
-Bueno...-el nerviosismo mata -sí, iré contigo a esa gala- sonrió y me dio una suave nalgada.
-Hoy tienes el día libre, no tienes práctica, pero mañana sí- dijo acercándose mucho a mí -hoy no te podré ver, pero sí mañana, así que luego de entrenar podemos salir y...- el timbre sonó, era hora de biología.
Me fui corriendo al salón, no sé cómo fue que me despedí de Kevin, pero da igual, la cosa es que llegué y sólo se encontraba un niñito rubio oscuro con el cabello sobre sus ojos y una barba ruda sentado en una esquina. Al verme entrar se levantó para saludarme.
-Hola tu- le dije.
-Buenos días Juana de Arco- tomó mi mano para besarla, haciendo una pequeña burla.
-Deja de burlarte de mi nombre- dije haciendo puchero.
-Imposible es perfecto para utilizarlo como burla- dijo riéndose a lo cual yo respondí con un puñetazo en su brazo -¡Ouch! Golpeas fuerte- dijo mientras se sobaba el brazo -eso te hace el doble de asombrosa- y besó mi mejilla.
-Idiota- sonreí -ven, siéntate a mi lado- y eso hizo.
-Oye- dijo luego de un rato -¿tienes algo que hacer el viernes por la noche?- dijo relajado, como si ya hubiese dicho eso un millón de veces antes.
Iba a responder, pero justo en ese momento llegó la profesora. Esa señora es una máquina, no paraba nunca de meternos información en la cabeza, no tuvimos ni una pausa durante esos 60 minutos ahí adentro -bueno, es de esperarse, es biología optativo, por lo tanto es más avanzada- y una vez que sonó el timbre, para mi fue como el coro de los ángeles del recreo, entonces mientras caminaba por el pasillo hacia mi casillero, poco a poco se fue acercando el rubio amante de la buena música.
-Oye, espérame- dijo cuando llegó a mi lado.
-Entonces sígueme el paso- dije y comencé a correr y él detrás persiguiéndome.
-Te atrapé- me tomó por la cintura fuerte.
-¡Ok paz!- me di vuelta para verlo de frente.
-Entonces...- no me soltaba aún -¿tienes planes para el viernes?
-Em...- hice puchero -sí, iré a la gala de los padres de Kevin, ya sabes esa cosa filantrópica.
-Agh- cubrió su cara con sus manos -¿irás a esa cosa? Pero es tan aburrida y estúpida.
-Lo sé, pero me invitó, y no sólo eso- saqué el collar de esmeralda -me regaló esto para que lo usara.
-Wow- soltó una risita -que perdedor tu novio.
-En primer lugar no es mi novio- no pudo evitar sonreír luego de oír eso.
-Pero te acuestas con él- levantó las cejas.
