Rame [Xiao x Reader]

capitulo 8

~𝓛𝓸 𝓹𝓸𝓬𝓸 𝓺𝓾𝓮 𝓽𝓮𝓷𝓰𝓸 𝓮𝓼 𝓽𝓪𝓷
𝓹𝓸𝓬𝓸 𝓺𝓾𝓮 𝓶𝓮 𝓱𝓪𝓬𝓮 𝓯𝓮𝓵𝓲𝔃

▪︎𝓡𝓲𝓬𝓪𝓻𝓭𝓸 𝓐𝓻𝓳𝓸𝓷𝓪

—. Esa carne tenía un sabor extraño

—. Es raro que algo no te guste a ti T/n

—. Toda la comida es buena, solo necesita una buena preparación —. Dijo limpiando sus manos con un paño—. ejem, ahora necesito encontrar al tipo del paquete

—. Podemos ir al muelle, los vendedores suelen estar más tiempo ahí

—. Vamos entonces —. Tomo el brazo del joven y corrieron entre toda la multitud de personas

—. [Es bueno volver a verte después de 11 años... T/n]

Al llegar al puerto de Liyue buscaron entre las personas al vendedor que T/n necesitaba.

—. Oye, como es esa persona —. Pregunto con una gota de sudor en su frente

—. ¡¿llegaste hasta acá sin ni siquiera conocer a esa persona?! —. Exclamo sorprendido el joven

—. Tengo que admitir que tenía prisa y no pensé en eso hasta ahora, pero te tengo a ti, ¡así que puedes ayudarme! —. Respondió feliz

—. Creo que tienes demasiada suerte —. Dijo con los brazos cruzados—. Es un hombre joven, con una altura mediana, cabello negro, y se llama Ji Tong

—. Ohhh, bueno, ahora no estoy tan perdida, ¡vamos por él! —. Nuevamente tenía a su amigo arrastrándolo del brazo—. No quiero perderte entre tanta gente —. El tomo el impulso de correr, esquivando todos los obstáculos que estaban frente a ellos, las personas los miraban como dos jóvenes traviesos en busca de problemas

—. Cuidado

—. Ey

—. Mira mamá

Eso era lo que escuchaban a su paso. Los hermoso recuerdos llegaron a sus mentes, sacando una sonrisa triste de sus caras, la separación que tuvieron en su infancia los afecto por igual, pero ambos supieron dejar todo en el pasado, sin la esperanza de volver a verse otra vez.

Chongyun se detuvo frente a unos comerciantes y comenzó a buscar al correcto.

—. ¿Dónde estará? —. Se preguntó a si mismo entre tantas personas

—. Esto será muy difícil —. Respondió T/n mientras se rascaba su cabeza

Frente a ellos un comerciante anunciaba sus productos.

—. ¡Hermosas joyas para su persona especial! ¡compre! ¡compre!

Por la curiosidad se acercaron, y eran cadenas, anillos y collares hermosos hechos con distintas piedras preciosas.