Tormenta (Parte 3)

869 84 22
                                    

Maratón (2/3)

-----

Me desperté gritando y sudadado entre las sábanas blancas con la respiración agitada y los pelos de punta.

Intenté calmar mi respiración mientras me acercaba a la ventana.Corrí un poco la cortina para comprobar lo que sospechaba.

El sonido de truenos y la luz de los rayos me hicieron dar un bote. ¿Por qué tiene que haber una tormenta precisamente hoy?

Es verano, y ayer el sol estaba más brillante que nunca sobre nuestras cabezas.

No hay manera humana de que pueda soportar una tormenta. Les tengo pánico.

Cuando estamos en épocas de lluvias siempre miro la predicción meteorológica para ver si se acercan tormentas. Cuando es así, me tomo una pastilla para poder dormir toda la noche sin despertarme con pesadillas.

Volví a acurrucarme bajo las sábanas temblando.

Pasé el dorso de mi palma por mis ojos, secando algún rastro de lágrimas, y tapé mis oídos intentando apaciguar el sonido de la tormenta. Pero fue en vano.

Mi cuerpo no dejaba de estremecerse con los ruidos procedentes del exterior y sollozos brotaban de lo más hondo de mi pecho.

Miré a mi derecha encontrando a una Doniya durmiendo tranquilamente en su cama.

Sin saber por qué, mis piernas recibieron la orden de levantarse de la cama y caminar por el pasillo hasta detenerse delante de la puerta de la habitación de Harry.

Me detuve por unos segundos sin saber qué hacer.

Ni siquiera sé por qué me he levantado de la cama, supongo que ha sido un simple impulso.

Ordené a mis piernas a dar media vuelta para volver a mi cuarto antes de cometer una estupidez,cuando un trueno que hizo estremecerme resonó por toda la casa, aumentando mi miedo.

Sin pensarlo más, cogí el pomo de la puerta y lo giré,dando paso a la habitación de Harry.

Entré ajustando la puerta detrás de mi, y me acerqué a la silueta de Harry de puntillas.

Se le veía muy tranquilo durmiendo y por un momento consideré no despertarle, pero la luz de un rayo me recordó los problemas para dormir.

Alargué el brazo y lo sacudí suavemente deseando que su sueño no fuera tan pesado como el de Marius.

-¿Harry?-Dije susurrando suavemente.

Para mi surte se revolvió en la cama y susurró algo imposible de entender.

Lo intenté una vez más, esta vez con un poco más de fuerza.

-Harry por favor despierta.-dije con la misma vocecita asustada.

Él pareció reaccionar y se incorporó un poco hacia donde yo me encontraba para ver de quien se trataba.

Abrió un poco los ojos y gruñó al ver que era yo.

-¿Ahora que pasa?-Dijo con una voz tan ronca que casi hizo que me olvidara del caos en mi interior.

-No puedo dormir...-Dije sintiéndome infantil y un poco avergonzada.

Volvió a gruñir, esta vez acompañado de un gemido de sueño.

-Es fácil, solo tienes que cerrar los ojos.-Dijo a punto de perder su paciencia.

-Por favor, tengo miedo.-dije lo más calmada posible agachando mi cabeza.

Por un momento me miró y me pareció ver un brillo de angustia en sus ojos.

-Anda, ven.-Dijo suspirando.

Abrió las sábanas para que me incorporara en la cama mientras él se situaba en la otra punta del enorme colchón, manteniendo las distancias.

Tengo que reconocer que eso me gustó.

El hecho de que él no se aprovechara de la situación me dio la confianza que necesitaba para meterme en la cama junto a él.

Murmuré un gracias y me acurruqué en la enorme cama,cerrando los ojos fuertemente y oliendo su perfume en la almohada

Crazy, stupid love (Harry y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora