❝¿Qué mujer de sangre caliente podría resistirse a un paquete tan delicioso como ellos? Y sin embargo, aquí estaba yo, obligada a quedarme en la zona de amigos❞.
A ella le gustaba los problemas.
Por suerte, para JungHee, problemas es exactamente lo...
Todavía media dormida, me quejé de quien fuera que estaba golpeando la puerta tan temprano en la mañana. Bueno, supongo que era de mañana, ya que el sol brillaba a través de las rendijas de las cortinas.
A mi lado, TaeHyung no se había movido, aún muerto para el mundo, pero en mi otro lado, JiMin se frotaba los ojos y maldecía.
— Dame un segundo —gritó, y mientras se sentaba, me miró— Buenos días, gatita.
— Mmm. Buenos días.
Se inclinó para besarme mientras el golpeteo comenzaba de nuevo.
— JiMin, por el amor de Dios. Abre la puerta.
JiMin y yo nos quedamos paralizados ante el sonido de la voz de mi hermano— Oh, mierda. —dijo JiMin, apartándose de mí, con los ojos muy abiertos.
Pude ver mi propia mirada de horror reflejada en ellos, y agité la cabeza.
— Finge que no estás aquí. —le dije.
— Ya me ha oído.
— Oh, cierto. —me mordí el labio inferior— Entonces tal vez no abras la puerta.
— Porque eso no es sospechoso.
— Si me ve aquí, te matará.
— Probablemente podría con él... Tal vez.
— Entonces SeokJin, NamJoon y probablemente toda la banda te mataría a ti y a TaeHyung.
JiMin maldijo de nuevo y se puso sus boxers. Mis ojos se posaron en su trasero y en los poderosos músculos de sus piernas. Aún sabiendo que JungKook estaba al otro lado de la puerta, no me detuvo para que me saciara, y cuando JiMin se dio la vuelta y me sorprendió con la mirada fija, sonrió y agitó su cabeza.
— Sabía que eras un problema. —dijo, saliendo de la habitación y llevándose un dedo a los labios.
Hice el movimiento de sellar mi boca y luego me acurruqué contra el cuerpo alto y cálido de TaeHyung mientras JiMin abría la puerta.
Mientras que JungKook no entrara, estaríamos fuera de la vista.
— JungKookie, amigo mío, es demasiado pronto para derribar puertas —dijo JiMin.
— Son las cuatro de la madrugada.
— Lo que significa que son las once de la mañana en Corea y yo no me despierto hasta después de la tres.
JungKook emitió un suspiro agitado, y sólo podía imaginar que probablemente estaba pasándose una mano por su recién teñido cabello rubio.
— Mira, ¿has visto a JungHee? Ella llegó anoche, pero dejó de contestar mis llamadas y mensajes, y no contesta a la puerta.
— Ojalá pudiera decir que sé dónde está, pero no la he visto. Tal vez está durmiendo por el jet lag.
Era todo lo que podía hacer para no reírme de la mentira fácil de JiMin, cuando JungKook dijo:— Sí. Tal vez.
— ¿Qué está pasando? —Preguntó TaeHyung soñoliento, y yo me levanté y le puse una mano sobre la boca.
Me había esforzado por escuchar lo que se decía y ni siquiera me había dado cuenta que se estaba despertando. Me llevé el dedo a los labios y apunté hacia la puerta. Pareció entender la indirecta, y yo me relajé un poco, hasta que escuché:
— ¿Quién era ese? ¿Está TaeHyung ahí dentro?
Oh mierda. Mierda, mierda, mierda.
— Uh, sí. Tenemos compañía.
Hubo una pausa, y entonces JungKook dijo:
— Oh. Maldición, hyung, lamento interrumpir. Yo sólo... ya sabes. Me voy. —contuve la respiración mientras él parecía irse, y luego dijo—: Si ves a Hee, dile que la estoy buscando.
— Lo haré. —JiMin cerró la puerta, deslizó el cerrojo, y cuando regresó a la habitación, sostuvo mi vestido desechado de anoche— No dejes que JungKook te vea con esto.
Solté la boca de TaeHyung y volví a la cama.
— ¿Por qué no?
— Acaba de verlo en el suelo.
— Ohh. Bueno, escaparme desnuda podría ser más incriminatorio, ¿no crees?
TaeHyung se sentó, su cabello rizado despeinado caía libremente por su frente.
— La mujer tiene razón.
— Puedo hacer que me suban otro vestido —dijo JiMin, caminando hasta el final de la cama—. Pero podría llevar un par de horas.
Bajé mi mirada sobre él, y cuando cayó por debajo de sus caderas, su polla cubierta se sacudió.
— Mmm. —dije, poniéndome de rodillas al ver la excitación de JiMin renovar mi lujuria— ¿Qué debemos hacer mientras esperamos?
— Tengo una buena idea. —TaeHyung nos quitó la sábana, y todo lo que pude pensar fue que si JungKook era el ángel de la familia, entonces yo estaba más que feliz de interpretar el papel de la diabólica gatita.
—Fin—
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Esta historia la ame muchísimo, forma parte de una serie llamada "ángel caído" deberían leerla, si les gusta el boylove.
Y aunque le cambie bastante cosas de la original para que se adaptará a los chicos me gustó como quedó. Por cierto investigue y la diferencia horaria de Francia y Corea del Sur son de siete horas más o menos.
