Mi Chico Perfecto

Capítulo 25: "Culpa":

PoV Nathan:

Jamás voy perdonarme si llega a pasarme algo a Tristan.
No puedo creer que intentó suicidarse por mi culpa
"Exacto, culpa, eso es lo que no te deja en paz".

Las lágrimas corrían por mi rostro y mis puños estaban cerrados. Hacía ya casi dos semanas que estaba en coma.

Era viernes por la madrugada y no podía dormir, una pesadilla me había despertado y no podía pegar un ojo
"Genesis" es muy temprano, va a enojarse si la molesto. Además, va a levantarse a desayunar muy pronto.

En mi casa sólo estábamos mi perrita
"Copito" es un nombre bobo pero le queda muy bien. Me había olvidado decirles que tengo mascota.
Lorena estaba con Tristan en el hospital.
La alarma programada de mi celular sonó y entré a la casa.
Había pasado prácticamente toda la noche afuera mirando las estrellas con Copito.

Me preparé el desayuno y me quedé en silencio. Cepillé mis dientes y tomé mi mochila. Estaba por salir cuando alguien toca la puerta, abrí y mi mejor amigo estaba parado como un soldado
—A la escuela — dice con una media sonrisa algo desdibujada. Asiento y salimos.

Estaba cansado pero a mi mente no le importaba
— ¿Nathan otra vez sin dormir? — me regaña
—Una pesadilla — me excuse, rodó los ojos y me sonrió
—Te apuesto a que va a ponerse bien — intenta animarme. Sonreí amargamente y continuamos.

Llegamos a la escuela y vi que Genesis hablaba con sus amigos, quería acercarme a hablarle pero preferí quedarme aislado como había estado haciendo desde que Tristan hizo lo que hizo.

Caminamos dentro de la escuela de clase en clase, de profesor en profesor.
Para ser honesto no estaba concentrado, mi cabeza estaba en la luna.
En uno de los últimos recreos, estaba sentado bajo un árbol en el patio escuchando a Cam hablar de Lily Wooder.
Mis párpados se caían del sueño terrible que tenia, hacía días que no dormía bien.

Estaba a punto de caer dormido cuando escucho su voz
—Cam, ¿podría hablar con Nathan a solas? — era Genesis. Alcé la mirada y me encontré con sus hermosos ojos que me contemplaban detenidamente reflejando pena y dolor.

Cam asintió y se marchó, ella se sentó a mi lado y bajé la mirada
—Te ves horrible — afirma con una suave risita
—Creo que me falta dormir un poco — admito sin energías
—Yo diría, unos días — respondió y pude notar un toque de angustia en sus palabras.

Frote mis ojos para despertarme un poco
—Mala noche — admito
—Sé porqué no has podido dormir, y eso me rompe el corazón — realmente quería abrazarla. Negué con la cabeza
—No lo entiendes, a estado en coma por casi dos semana, ¿y si no despierta? — sentía tanta frustración he impotencia al respecto. Apreté mis puños con fuerza
—Si llega a morir por mi culpa, no, no voy a perdonarme jamás — confieso.

Sentía que el mundo se me venía sobre mí. Tristan al final de todo era mi único primo y no supe quererlo, ahora está en coma por mi culpa.

Genesis me miró sin decirme nada me abrazó, no la cuestione, solo la abracé fuerte y oculté mi cabeza en el hueco de su cuello.

Necesitaba tenerla a mi lado y sentir que ella estaba conmigo
—Gracias — susurré lentamente
—Por no dejarme, por estar a mi lado — añadí, ella acariciaba mi cabello suavemente
—Sé lo que se siente — susurró apenada
—Genesis... — comencé a decir
— ¿Si Nathan? — tomé aire y también algo de valor
—Te... — continúo
"Vamos no seas cobarde, es ahora o nunca"
—Te quiero — finalizo
"Bien, ya está dicho, solo espero que no salga corriendo o el rechazo"

Se quedó en silencio un momento
—También yo, Nathan — respondió segura.
Sonreí, después de dos semanas logré sonreír nuevamente, acabé el abrazo y la besé. Por Dios que la besé.

Hacía días que no sentía sus labios junto a los míos, me correspondió al beso, pero el timbre sonó
—El último profesor faltó, me dijo Cam — sonrió y acomodó mi cabello
—Te aconsejo dormir hasta el año que viene — dice Genesis sonriendo
—Sólo si estas junto a mí — se sonrojó.
Nos levantamos y cuando fuimos al salón, un profesor nos dijo que salíamos antes.

Salimos y tomé a Genesis de la mano
— ¿Qué ocurre? — pregunta confundida, sonreí
—Me olvidada de algo — digo y antes de irme la besé profundamente.

Podía hacerme adicto a sus labios sin ningún problema, ella me volvía loco y podía dejar mi mente en las nubes. Simplemente ella.

Capítulo 25: Nathan se siente muy culpable, y creo que cada vez él y Genesis están más y más cerca.

Si te gusta mi historia Vota y Comenta!

Un Beso!!

-Clari!