Capítulo 022 ~Llamadas y Mensajes~

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 Capítulo 022 ~Llamadas y Mensajes~

– ¿Estás segura?

–Sí.

–Sky…

–Mételo de una vez.

Trenton frunció el ceño y metió todo de golpe.

– ¡Joder, Trent! -gemí de dolor.

– ¡Lo siento! ¿Te duele mucho? ¡Te dije que no tenía que hacerlo!

– ¡Tráeme hielo! –supliqué y metí la mano debajo del agua helada del grifo.                   

Estábamos cocinando pasta, y el idiota de mi novio no pudo seguir los simples pasos de colocar los fideos dentro de la olla sin que el agua –hirviendo– salpicara. Lo cual no logró, ya que un chorro de esta cayó en mi mano. Según lo que podía admirar de mi mano roja e hinchada no era nada muy grave.

–Aquí tienes –murmuró Trenton con preocupación y me tendió un hielo envuelto en una servilleta de tela–. Lo siento mucho.

Tomé el hielo y lo puse sobre mi mano, suspire agradecida.

–Gracias y estás perdonado –besé su mejilla–. No es tu culpa el no tener dotes en la cocina.

–Habló la chica que quema cocinas.

Rodé los ojos e hice una mueca de dolor.

– ¿Duele demasiado? ¿Necesitas algo? Me siento culpable, Sky.

–Sólo cállate y distráeme.

– ¿Qué tipo de distracción? –Preguntó con las cejas arqueadas.

–Tenemos diez minutos antes de que la comida esté lista –murmuré y acaricié su rostro con la mano sana–. ¿Alguna idea para que se pasen rápido?

–Muchas –susurró a mi oído y mordió mi lóbulo.

Comenzó a descender por mi cuello con besos húmedos y sus manos se posaron en mis caderas. Ladee la cabeza para que tuviera más acceso a mi cuello y suspire cuando dio una lamida sobre mi piel sensible. Sus labios se apartaron y se pegaron con los míos, seguí el beso de una manera intensa y enredé mis brazos detrás de su nuca. Trenton me levantó del suelo y rodee sus caderas con mis piernas, Trent me sentó sobre la barra de la cocina y en ningún momento sus labios se despegaron de los míos. Me apegué a él y un pequeño gemido escapó de mis labios al sentir la creciente erección entre las piernas de mi novio.

–Me encantas –susurró apartándose un poco.

Repartí besos húmedos por sus labios, comisuras, mandíbula y cuello. En este último, me esforcé un poco y le hice un chupón que, estaba muy segura, dejaría una gran marca.

–Ya pasaron diez minutos. –dije divertida y apreté el bulto que se formaba en sus pantalones.

Trenton gimió. Enredé las manos en su cabello y lo bese con intensidad para luego apartarme.

–No hagas eso –me alejó de él con el ceño fruncido.

–Te salió lo diva.

–Ja-Ja –puso los ojos en blanco y me dejo en el piso.

–Me encanta usar tu ropa –comencé con tono seductor mientras me dirigía a la cocina. Trenton me había prestado una remera y un short que era de un pijama que le quedaba chico.

 Caminé hacía la estufa contoneando las caderas, para tentarlo e irritarlo al mismo tiempo, y me agaché más de lo necesario para apagar el fuego. Repetí estás mismas acciones mientras tomaba la olla con un repasador y volcaba todo su contenido en un colador.

You and I? NEVER!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora