Two of Us - Louis Tomlinson
Mis ojos no dejaban de observar la pared frente a mi, las lágrimas empezaron a aglomerarse en ellos. El dolor en mi pecho era imposible de no sentir, era una sensación que no esperaba sentir nunca.
- Minho... -la voz de mi madre retumbó en mi habitación- te vino a buscar Félix.
Asentí y escuché los pasos de mi amigo acercarse a mi, sus brazos me rodearon y las lágrimas salieron de golpe. Trataba de calmar mis sollozos con pequeñas palmadas en mi espalda.
- Sé que duele -susurró- pero sabias que pasaría en algún momento...
Mis ojos se postraron en los suyos y la lastima con la que me miraba quemaba mi pecho.
- ¿Por qué no nos pueden dejar ser felices? -sollocé- ¿Por qué? Estábamos bien... yo solo no quiero que se vaya.
Félix suspiró.
- Hablando de eso... -susurró- el vuelo sale hoy-.
Mis ojos se abrieron con sorpresa y levantándome de un solo golpe salí corriendo en dirección a la puerta.
- ¡Min! -escuché a mi amigo- ¡MINHO!
Voltee a verlo esperando por alguna respuesta a su llamado.
- Buena suerte...-.
Empecé a correr como si no hubiera mañana como si el aeropuerto quedara cerca de mi casa.
« Esta mañana me desperté todavía soñando...
No había forma de que llegara pronto al aeropuerto, lo sabía pero no iba a perder las fuerzas. Tenía que llegar.
...con recuerdos jugando en mi cabeza, nunca sabrás cuanto te extraño...
Mi pecho dolía, no sabría explicar qué dolor era, si por la falta de aire, si por el dolor de perder a quien amo o por la sola idea de que podía no llegar.
...el día que te llevaron, ojalá fuera yo...
Me detuve para poder respirar, las lágrimas bajaban por mi rostro por toda una mezcla de dolor. Mi respiración era sumamente agitada, sentía que iba a desfallecer pero faltaba poco, sabía que faltaba poco.
...pero una vez me dijiste: no te rindas, puedes hacerlo día a día...
Una respiración profunda y empecé a correr nuevamente, tenía que llegar.
...y los diamantes, no se convierten en polvo ni se desvanecen...
Levanté la mirada al ver que ya estaba en la puerta del aeropuerto, busque la información en las pantallas que habían y la desesperación de que no podía encontrar nada, hasta que la información que buscaba se robo mi atención. Estaban por abordar, mi corazón se paralizó y mis pies solo respondieron por inercia buscando la puerta de embarque.
...así te mantendré aquí, día y noche. Hasta el día de mi muerte...
- ¡Jisung! -grite- ¡JISUNG!
La multitud me estaba matando, no lo veía por ningún lado. Sentía que no lo había alcanzado.
...estaré viviendo una vida para los dos, seré lo mejor de mi...
Entre toda la multitud lo vi, estaba en la fila esperando su turno para ingresar. Sus ojos reflejaban la misma tristeza que los míos.
- Jisung... -susurré mientras corría hacia él- ¡Jisung!
Sus ojos se abrieron con sorpresa cuando me vio, las lágrimas se empezaron a formar en sus ojos. Me metí en la fila, ignorando las quejas de los demás y lo abracé, necesitaba tenerlo entre mis brazos.
- Minho... -sollozó mientras se aferraba a mi-.
Toque suavemente su espalda tratando de calmarlo aunque yo estuviera peor, lentamente lo saque de la fila para que no haya problema con la gente que iba atrás de él.
...siempre te mantendré a mi lado, estaré viviendo una vida para los dos...
- No deberías estar aquí, si se enteran me mandarán más lejos y yo...-.
Abruptamente mis labios sobre los suyos lo callaron, era un beso suave pero cargado de muchos sentimientos.
...incluso cuando esté solo, sé que no estaré solo...
No quería separarme de él pero la falta de aire nos distanció, la sonrisa que había en su rostro suavizó mi corazón. Esa sonrisa que tanto amaba ver pero que no vería más.
...tatuadas en mi corazón están las palabras de tu canción favorita...
- Prometo que voy a volver -susurró- volveré por ti -las lágrimas aparecieron nuevamente en su rostro-.
Asentí.
- Sí no regresas... -susurré- yo iré por ti.
Sonrió entre lágrimas igual que yo.
...sé que mirarás hacia abajo, te juro que te voy a hacer sentir orgulloso...
- Hasta mientras... -dije mientras acariciaba su rostro- ...estaré viviendo una vida para los dos.
Estuve con él, de pie al otro lado de fila con su mano entrelazada con la mía, la idea de que regrese a Malasia me dolía pero no podía hacer nada.
...podía sentir tu sangre correr a través de mi, estás escrito en mi ADN...
Verlo entregar su pasaporte y alejarse de mi dolía, cada paso que daba dolía pero tenía que ser fuerte.
- Por favor no voltees... -susurré- por favor no voltees.
Jisung se quedó quieto en la puerta, dudando si volteaba a ver por última vez a Minho o no, sabía que si volteaba no iba a querer irse, no podía hacerlo. Debía ser fuerte.
...mirando hacia atrás en cada espejo, sé que estarás esperando...
Luego de una pequeña duda avanzó por el largo pasillo, Minho soltó un largo suspiro cargado de tristeza cuando lo perdió de vista.
- Gracias... -sonrió mientras las lágrimas bajaban por su rostro-.
Comenzó a alejarse del aeropuerto, el pecho dolía y las lágrimas no dejaban de caer. Su primer amor se había ido; el sonido de un avión volando lo hizo mirar hacia el cielo, sonrió un poco y suspiró, lo extrañaría pero la promesa de verse de nuevo le daba la fuerza de seguir adelante.
...te veré de nuevo. »
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𝙾𝚗𝚎 𝚂𝚑𝚘𝚝𝚜 - 𝚂𝚝𝚛𝚊𝚢 𝙺𝚒𝚍𝚜
Fanfictionℌ𝔦𝔰𝔱𝔬𝔯𝔦𝔞𝔰 𝔠𝔬𝔯𝔱𝔞𝔰 𝔮𝔲𝔢 𝔢𝔰𝔠𝔯𝔦𝔟í 𝔟𝔞𝔰á𝔫𝔡𝔬𝔪𝔢 𝔢𝔫 𝔠𝔞𝔫𝔠𝔦𝔬𝔫𝔢𝔰 𝔮𝔲𝔢 𝔪𝔢 𝔤𝔲𝔰𝔱𝔞𝔫.