En algún punto de nuestras vidas, llega la hora de presentar a la familia, es decir, a los suegros. En algunas parejas esto no es posibles, ya sea por problemas personales o simplemente por no tener alguna figura paterna y materna, también en ciertos casos las cosas no suelen salir como lo esperado, como que a tus padres no le agrade tu pareja o que tus suegros no les caigas bien. Suele pasar mucho pero también es al rebes donde tú o tu pareja es querido al tal punto que ya los quieren ver casados. Mis padres siempre quisieron lo mejor para mí, así que cuando tenían la oportunidad me decían que me tenía que casar con un doctor, abogado o una persona que tenga algo de dinero, aún así decían que si yo lo amaba de verdad para ellos ya estaría bien... Bueno supongo que aplica para todo...
-Y dime cariño ¿De qué trabajas?
-Yo pues, llevo a las personas malas a un lugar terrible donde lo pasarán por el resto de sus vidas.
-¡Oh!... ¿Así que eres algo como un abogado?
-Amm... N-
-Si...algo así.
-Que increíble ¿Ves cariño? Por fin tenemos a alguien que cuide a nuestra niña.
-Mamá me puedo cuidar yo sola...