Her Friends - Mikasa Ackerman

Sasha Blouse

En la legión de reconocimiento siempre se había separado a los cadetes en dormitorios para mujeres y hombres respectivamente, suponían para evitar malentendidos u otras cosas, aunque ciertamente la legión no era un lugar reconocido por ser un lugar para amantes, los comandantes querían evitar cualquier tipo de situación no deseada.

Sasha blouse aun recordaba su primer dia en la legión, más bien, todos podían recordarlo, quién olvidaría el acto más peligroso de la chica patata al ofrecerle la mitad de su patata al entrenador Shadis? exacto, nadie. Al terminar de dar las vueltas que le fueron asignadas como castigo recuerda haber conocido a Christa Lenz, una chica tan dulce que le ofreció una patata como recompensa por todas sus vueltas al campo, jamás olvidaría ese acto tan solidario para ella, y tampoco olvidaría haber visto a la chica llamada Ymir diciéndole alguna cosa a la rubia, ella no estaba prestando atención, lo más importante del mundo estaba en sus manos siendo mordido y masticado por ella.

Después de conocer a la linda chica rubia y a la malhumorada y excéntrica pecosa siguió conociendo a mas chicas que estaban luchando para convertirse en miembros de la legión, incluso hizo amigos como Jean y Connie que parecían estar igual de locos que ella, aunque el chico castaño lo sabía ocultar bien. Conoció y habló con mucha gente en sus días como cadete, con Eren Jaeger -el suicida según Jean- con Armin Arlert, Reiner y Bertholdt y la chica que siempre estaba pegada con Eren y Armin, aunque debía admitir que con ella no había hablado casi nada, era alguien muy callada y difícil de hacer que reaccione a algo, ya que mayormente parece estar estoica preocupada por esos dos chicos, si recuerda bien, su nombre era Mikasa Ackerman. 

En sus días como cadete ella compartía el dormitorio con todas las chicas de ahi, a veces en las noches solía desvelarse junto con Mina o Christa, hablando sobre que entrenamientos harían mañana, o que habría de comer al despertar e incluso algunas veces hablaban sobre sus familias, sin embargo, Sasha solía mentir sobre sus orígenes del bosque y de cazadora, diciendo en cambio que ella venía de los muros, no sabia porque le avergonzaba eso, simplemente no queria decirlo y queria tener mas cosas en común con las chicas del dormitorio.

Graduarse y haber quedado en el noveno lugar fue algo que enserio la sorprendió, pero más le sorprendió el haberse quedado ahí parada cuando facilmente podría ir a reclamar por un lugar seguro en la policía militar tal y como se lo merecía al haber entrado en los 10 mejores cadetes, pero no lo hizo, ¿lo habrá hecho por sus compañeros caídos en trost?, ¿porque quería demostrarse algo a si misma? o porque simplemente estaba loca? no lo terminaría de entender nunca.

Al haber entrado al cuerpo de exploración -y al ser pocos los cadetes que entraron- se les asignó nuevas habitaciones pero ahora compartidas en pareja, y su pareja no había sido nadie más que la famosa Mikasa Ackerman. 

Genial - pensó sarcásticamente la castaña - nunca tuvo oportunidad de entablar una amistad con ella y ahora tendría que compartir ese espacio tan intimo y relajante para descansar con ella. No era que le molestase eso, sin embargo, al no haber charlado lo demasiado con la chica antes, pensaba que quizás los momentos que podrían pasar ahi podrian ser un tanto incómodos, tal vez eso, o tal vez Mikasa simplemente la ignoraria como lo hace con todo el mundo.

Todos esos pensamientos perduraron en su mente incluso cuando ya habían cumplido una semana de haber compartido habitación, Mikasa al menos trataba de no ignorarla la mayor parte del tiempo y Sasha agradecia eso internamente, aunque la pelinegra tampoco trataba de entablar conversaciones en la noche o en las mañanas en las cuales eran donde tenían más tiempo libre por asi decirlo, y eso ciertamente ponía un tanto triste a Sasha.

No fue hasta la novena noche que pasaron juntas en la que Sasha pudo conocer un poco más de Mikasa.

Era una noche lluviosa, para ser exactos durante todo el dia habia estado lloviendo, no se había convertido en una tormenta hasta la noche cuando todos estaban dormidos, sin embargo, algo hizo despertar a Sasha y no fue exactamente el rayo que había caído en ese momento.