Historia en hiatus unu
Please, give me a remedy.
"Tú eres mi remedio, no necesito nada más en esta vida."
Basada en mi canción favorita de bangtan.
Donde Taehyung sufre de disociación y vive encerrado en su casa, un día sale creyendo haber superado...
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Taehyung abrió sus ojos y lo primero que miró fue a su primo.
"Al fin" celebró el mayor, haciendo un ademán exagerado con sus manos. "Vamos, desayunemos y después hablemos, ¿quieres?"
Lo dejó en el cuarto, Taehyung dio un largo suspiro. No tenía ganas de nada, ni de nadie.
Seokjin se había estado quedando con él desde el incidente que había ocurrido, y aunque el pelirrosa sabía las razones, no podía esperar la hora para que se fuera, porque también le gustaba la privacidad.
Pero se resignaba, porque tampoco quería estar solo.
Con ese día, ya iban cuatro semanas de todo el principal incidente. Cuatro semanas de no saber absolutamente nada de Jungkook y de extrañarlo como nunca lo había hecho con alguien.
Dejó de hacer las cosas en su agenda, dejó de ser tan perfeccionista y comenzó a hacerlo todo como él quisiera. Si se levantaba de la cama, lo haría y sino, entonces no pasaría nada.
Sabía que se recuperaría, porque aunque extrañaba demasiado a Jungkook, era fácil si no recibía noticias de él.
Como Hoseok le dijo: "poco a poco, desaparecerá de tu mente"
Y si le sumamos el estrés que tenía en esos momentos, Dios, pasaba las mañanas queriendo arrancarse el cabello y solamente por las noches se torturaba con el recuerdo de su ex.
Se levantó y no se dignó siquiera en bañarse, bajó directamente a la cocina y Seokjin estaba entretenido con una sonrisa tonta en su celular.
"¿Cuándo te va a regresar a Yeontan Jimin?" el rubio inquirió en cuanto notó la presencia de su primo en la entrada del lugar, aunque seguía escribiendo algo. "Ya extraño a la bola de pelos. Al menos él te mantenía más animado y te despertaba temprano para que lo alimentaras."
Bajó el celular, bloqueándolo y manteniendo su buen humor. Últimamente así era, Seokjin feliz y Taehyung triste.
La sonrisa en su cara no fue contagiosa, pues Taehyung se pasó de largo hasta ir por un vaso y se sirvió soda.
Sin embargo, cuando estaba a punto de dar su satisfactorio trago, el vaso le fue arrebatado por su hyung. Taehyung le miró con desprecio.
"Veme como quieras, pero ni creas que voy a dejar que tomes soda cuando no has comido desde ayer en la mañana" se quejó, tomándole la muñeca para jalarlo hasta la silla y sentarlo a su lado. "No hice el desayuno para adornar la mesa."
Con suspiros pesados se dispuso a devorar lo que su estómago resistió.
"¿De qué querías hablar?" preguntó, la servilleta en su mano viajando hasta su boca para quitarle restos de comida. "No voy a escribir ahora, no puedo-"
