Please, Let Me Be Your Brother

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Algunos días habían pasado desde aquel incidente en la casa de la nueva familia

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Algunos días habían pasado desde aquel incidente en la casa de la nueva familia.

Desde aquel día el padre de los tres chicos se la pasaba sumergido en sus pensamientos culpandose por ser un mal padre.

Mientras que la chica intentaba superar aquel dolor que cargaba desde la pérdida de su progenitora y su hermano mayor la acompañaba.

Y por último, el menor de la familia había dejado de molestar a ambos chicos, ahora los ignoraba y no les dirigía la mirada.

Si bien, se sentía mal al ver a su media hermana en aquel estado, estaba confundido por todo.

Posiblemente el orgullo le impedía disculparse y comenzar una nueva relación con aquellos dos adolescentes.

— Taehyung y yo estaremos en una cena del trabajo, llegaremos algo tarde así que no podremos estar con ustedes en la noche

— Está bien — sonrió el hijo mayor de aquella familia —. Tengo clases en la academia de inglés en unas horas, pero regresaré al terminar

— ¡Llegué! — la voz de la chica resonó después de escuchar la puerta principal ser abierta

— Bienvenida — respondió el mayor a la chica —. ¿Vienes a comer?

— Ah, no. Ya comí antes de venir — sonrió mirando a las personas de la mesa

— ¿Harás algo en la tarde?

— No tengo ningún plan, así que estaré en casa

— ¿Podrías cuidar a Hyunmin?

— Mamá, puedo cuidarme solo

— No creo que lo necesite, pero estaré con él en casa así que no estará solo — respondió sonriendo muy leve

— Tienes razón  — soltó la mayor sin saber que responder mientras sonreía nerviosa

Y sin más, siguieron comiendo en un silencio que en ocasiones era roto por la mayor para que no fuera tan incómodo el ambiente.

Mientras, la chica iba a su cuarto para iniciar sus tareas sintiendo su estómago sonar.












































[...]





























— ¿Por qué existieron las matemáticas? — suspiró cansado mirando con total confusión su cuaderno —. ¿Entonces de que sirven las calculadoras?

— Suenas igual que la jirafa — sonrió para ir con el menor, el cuál estaba en la mesa —. ¿Quieres que te ayude? Soy buena en eso

— No lo necesito, se como responder eso

— Entonces sabes que esa ecuación esta mal — señaló el cuaderno del chico —. X es igual a ocho

— Lo sabía — respondió con un leve rosa en sus mejillas borrando aquella respuesta avergonzado

— Supongo, bien, si no lo necesitas me iré

— ¡Espera! — el chico tomo la manga del suéter de la chica —. ¿Me puedes ayudar?

Está sonrió grande mientras se sentaba junto al chico —. Comencemos por este

Una hora después aquellas operaciones estaban hechas y el menor había comprendido las cosas.

Agradecía que la chica explicara de tal manera que fuera muy fácil comprender todo.

Algo que la maestra no lograba.

Después de eso agradeció a la mayor y se fue a su cuarto. Mientras la chica se paraba y también iba al suyo.

Subiendo las escaleras encontró al menor viendo la tele en aquella pequeña sala de estar que tenían.

— ¿Quieres ver algo?

Pero no respondió a su pregunta.

— Quiero ver un drama, pero Soobin no quiere verlo conmigo, ¿quisieras verlo conmigo? — preguntó aún recibiendo silencio —. Y si...

— ¿Y si me dejas solo? Lo siento, pero no soy Soobin. No soy tu hermano y no podemos estar juntos todo el tiempo — respondió enojado el menor

Aquella serie que se estaba televisando era su favorita, y sentía que aquella chica no lo dejaba verla cómodo.

— Lo olvidé, lo siento por la molestia — su voz sonaba distinta, apagada y triste

En ese momento se arrepintió de haber hablado así.

Ella lucía un poco mejor desde aquella noche e incluso ignorando a ambos hermanos ella seguía intentando ser cercana a él, pero él solo escapaba de cualquier posible lazo con ambos chicos.

Mientras veía a la chica retirarse sentía la culpa.

Hasta que un ruido lo sacó de aquella preocupación, dando paso a otra. Al escuchar aquel ruido se levantó temblando.

— ¿Choi? ¿Choi Sooah? — llamó sin recibir respuesta

Se dirigió a la habitación de está encontrándose a la chica tirada en el piso en la puerta de su cuarto.

— ¡Sooah! Vamos no es gracioso — dijo nervioso moviendo el brazo de la chica sin recibir respuesta —. Basta, lo siento, ¿si? Pero no caeré en esto

Los segundos parecían horas y aquel chico solo se desesperaba con cada uno que pasaba.

Lágrimas comenzaban a caer mientras movía a la chica.

— Perdóname por como te traté, te juro que desde ahora te abrazaré todos los días y te diré que te quiero, pero por favor, no mueras noona — sollozaba en el hombro de la chica abrazandola

— ¿Hyunmin? — preguntó una voz desde la entrada

Choi Soobin había llegado.

— ¡Hyung! — gritó el menor bajando con prisa las escaleras abrazando al mayor, el cuál se sorprendió, pues el menor nunca lo había llamado así y menos lo había abrazado —. Noona... Ella se desmayo

El mayor abrió ligeramente sus ojos mientras avanzaba por las escaleras.

— ¿Qué pasó?

— Ella estaba normal y cuando iba a su habitación sono un ruido, cuando me fije ya estaba en el piso — respondió llorando el chico —. ¿Ella estará bien?

— ¿Papá? — pronunció el mayor llamando al teléfono

— ¿Papá? — pronunció el mayor llamando al teléfono

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Butterfly - Lee HeeseungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora