|RED|NORENMIN

Dos.

—¡Por fin!.—grito Mark. Después de tanto estudiar, repasar y joderse la cabeza habían acabado la semana de exámenes, la mayoría de los estudiantes suspiraba al ver que su último examen era metido en un maletín y retirado.

Muchos empezaron a dialogar sobre ir a una discoteca y celebrar que todo el infierno había finalizado, por otra parte Renjun solo quería ir a casa y dormir todo el maldito dia, estudio y se fajo tanto que no podía ni con su propia alma.

Se levanto y se despidió de Hae el cual lo tomó del brazo antes de que se fuera.—Hey, vamos a celebrar.—Renjun nego y aclaro que estaba muy cansado a lo que su amigo entendió.—Bueno, pero recuerda que mañana es la fiesta donde Chenle así que iremos a comprar ropa antes de ir.—Renjun solo asintió y se retiró del salón de clases.

La verdad era que tenía un poco de nervios y miedo al ir a esa fiesta, él sabía que Hae estaría con su pareja asi que quedaría completamente solo en el lugar, Renjun no era de muchos amigos pero eso no significaba que no la pasara bien.

Por otra parte Renjun era observado por dos chicos los cuales sabían que la razón por la que esté se alejó de ellos era por que gustaba de ambos, ¿como se enteraron? Pues digamos que el más bajo no era muy bueno aparentando y su amigo tampoco al verse acorralado por Jeno y Jaemin.—Me lo quiero comer.—dijo Jaemin mientras observada detenidamente como Renjun se alejaba.—Cálmate, casi lo espantas en la clase de matemáticas, mañana estará en la fiesta y por lo que tengo entendido Hae llevara a alguien, no creo que Renjun tenga a alguien a quien llevar.—hablo de manera tranquila.

Estos dos chicos tenían gustos muy particulares por lo que cuando vieron a Renjun por primera vez quedaron flechados al instante por su hermosa apariencia, tes blanca, sonrisa tierna y angelical, apareciencia de que no mataba ni una mosca, cuerpo delgado pero con algo de curvas y voz que parecía de los mismo ángeles, ahí fue donde decidieron lanzarse a la conquista lo cuál no era una competencia de quien se quedaría con él, simplemente el que él quisiera pero con lo que ellos no contaron era que el más bajito gustaba de ambos.

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El sábado llego y justo con el la salida para comprar ropa, tanto Renjun como Hae se encontraban viendo que comprar.—Entremos aquí.—dijo Hae jalando del brazo al más bajito sin importarse si se oponía.

Mientras Renjun veía que pantalón comprar sin querer se chocó con alguien, de manera inmediata le dirijo la mirada para disculparse lo cual no pudo salir de su boca al encontrase con que esa persona era nada mas que Lee Jeno.—L-lo siento.—el más alto pronuncio un "no te preocupes " agregandole una pregunta.—Estamos comprado ropa...para h-hoy.—

—Entiendo, por ahí vi a Haechan, me imaginé que estarías por aquí.—afirmó observando como el castaño miraba a todos lados menos a él. —te vas a medir eso?.—Renjun dirijio su mirada de inmediato a la ropa que tenía en el mano y asintió.

—Si pero estoy buscando una camisa, no soy muy bueno escogiendo ropa.

—Que lindo.—pronunció Jeno para si mismo.—Yo te ayudo a escoger, creo que se cual te quedará bien.

Después de aceptar con mucha pena la ayuda Haechan se les unió para encontrar la camisa adecuada, mientras los dos empezaban la búsqueda Renjun estaba probándose los pantalones.—Esté me queda muy grande, creo que esté me quedará mejor.—y como si fuera adivino así fue, noto como el pantalón le resaltaba sus delgadas pero tonificadas piernas, levantaba su pequeño pero abultado trasero y le hacía ver una figura de impacto.

—Ey, pruebate...—Jeno no termino de articular cuando su mirada se pasmo en el trasero de Renjun, sintió como la sangre le corría directamente a su miembro. Jeno entró al probador y cerró la puerta acorralando a un pequeño y sorprendido Renjun.—Si no te gusta puedes detenerme.—al terminar la frase ataco los labios del más bajo de manera violenta.

Huang no entendía que pasaba pero lo que sí sabía era que los besos de Jeno eran la gloria, la forma tan hambrienta en como lo devoraba y como pedía a gritos que le permitiera meter su lengua en la boca de él, Jeno había dicho que si no le gustaba podía detenerlo pero Huang no lo haría.

Lo acorraló en el rincón del probador, le subió la camisa y paso sus manos por la pequeña cintura mientras notaba como Renjun se tensaba ante su toque, bajo con lentitud y poso sus manos en el pequeño pero abultado trasero dandole un apretón.

—Mmhh...e-espera, alguien podría venir.—Dijo mientras trataba de recuperar el aire. Jeno atacó el cuello de Renjun mientras lo pegaba más a su cuerpo notando como el más alto tenía un pequeño problema ahí abajo.

Jeno entro en razón y se despegó de Renjun, lo miro de pies a cabeza y suspiro cerrando los ojos mientras trataba de contener las ganas de comerse al más pequeño.

—Lo siento, mira estas opciones, yo estaré afuera.—no le dio tiempo de responder cuando Jeno ya había salido.

Se pegó a la pared y se deslizó por esta misma mientras trataba de digerir lo que acaba de suceder, llevo sus manos a su rostro, contuvo un grito, respiro y procedió a tranquilizarse.

—Calmate.—observo su entrepierna y noto como su pene estaba erecto. En sus adentros deseaba que Jeno jamás se hubiera detenido y se lo hubiera comido ahí mismo pero por otra parte, su parte razonable, sabía que eso sería un problema debido a que estaban en un lugar público.

La tarde de ese día transcurrió de manera normal luego del incidente, Renjun se encontraba en su habitación pensando si en verdad debería ir.
—Solo iré un rato y busco una excusa para irme antes de toparme con alguno de esos dos, sencillo.