Mi nombres es Madison Rase, tengo 15 años y te contare la historia detallada de cómo es que mi vida va siendo encantadoramente destruida por un chico de ojos bonitos, sonrisa deslumbrante y en serio asquerosamente sexy. ¡Maldición! ¿Por qué todo tra...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
—Madison! Llama mi madre desesperada.
—Ya voy!! —Le grito desde mi habitación, inmediatamente acabo por meter mis cuadernos, me doy una última vista en el espejo y digo— ¡Diablos Maddy! —en tono decepcionante, ¿Es lo mejor que te puedes ver? —digo volteando los ojos, y no, no exagero, tengo puesto unos jeans clásicos negros, un polo simple muy ancho con una pizza en el centro y un cortaviento negro, amo el color negro, soy muy pequeña y siempre he pensado que la ropa no me queda como quiero, pero tampoco es algo que no me deje dormir por las noches.
Bajo las escaleras pisando fuerte.
—Ya estoy aquí no tienes que estar gritando —dije—frunciendo el ceño de una forma divertida.
— Si claro, faltando 20 min para que llegues a tiempo, vete que llegarás tarde el primer día. —dice mi madre algo fastidiada sin dejar de hacer lo que hace. — Si ya me voy, ¿no es buena idea que la chica latina llegué tarde en su primer día cierto? —dije riéndome. — Largo de aquí latina! —grita mi mamá — Ya me fui—grito desde afuera.
*Salgo a tiempo para el autobús y me siento en el medio*
Si así es, a pesar de llevar toda mi vida aquí, o bueno desde que tengo uso de razón, sigo haciendo ese tipo de bromas a mi madre, es divertido ser diferente, me encantan mis raíces y estoy orgullosa de ellas, además aquí ya tengo amigos.
Amigos en grandes cantidades no, pero los tengo y solo a dos amo con todo mi corazón, son los mejores amigos de la vida que alguien puede tener.
Bajo del autobús y voy caminando por el estacionamiento—busco con la mirada, cuando lo veo. Adrián, Adriancito es mi mejor amigo, lo conocí cuando llegué aquí, él fue la primera y única persona en acercarse a mí cuando entre al kinder, es muy dulce, pero sé que con otras personas se muestra duro y desafiante.
—Hola pequeña —dice Adrián tocándome cariñosamente el cabello. Me gustaría decir que me dice pequeña de cariño, pero no, es por mi tamaño, recordar cómo obtuve ese apodo es algo vergonzoso, creo que es una manera de decirme enana sin hacerme sentir mal.
— Hola muchachote —contesto—colgándome de su cuello como un koala y dándole un beso en la mejilla.
—Y Dani no viene contigo? —me pregunta. —No, no vine con ella porque...
Y ahí viene, la diva inalcanzable, el amor de mi vida, sexy, despampanante, ya ni tengo palabras para describirla, puedo decir orgullosamente que mi mejor amiga es realmente sexy , ella es ligeramente más alta que yo, delgada, tiene el cabello castaño claro, sus ojos son café oscuros, su piel clara hace un excelente contraste con su hermoso cabello que se ve realmente cuidado y lacio, lleva puesto uno jeans azules con zapatillas blancas que tiene detalles de color rosa, un polo clásico negro y una casaca de cuero que no se ve muy abrigadora