Kaira Beyer

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Nunca me considere como alguien muy social, mi Tita decía que prefería pasar toda mi vida leyendo que en el mundo real, y pues quien no. Vivía en Alemania, con mis padres pero cuando murieron hace cuatro años me mude con mi abuela a Inglaterra, pero ahora voy camino hacía mi nuevo destino, me encuentro volando de Londres a Estados Unidos, curso segundo año de preparatoria, y confesando nunca eh tenido novio, y pensándolo bien ni amigos, después de la muerte de mis padres mi Tita prefirió que yo estudiase en casa con profesores particulares, pero ahora tengo que ir a la escuela, estoy muy nerviosa pero tengo muy claro que nadie me dará importancia (siempre es así).    

Faltan dos semanas para entrar a clases y mi Tita me pidió que conociera la ciudad, ya van dos paseos en bus que doy, me  siento perdida por suerte hay un sitio de helados a unas cuadras.

Llego y pido un cono de vainilla, es mi sabor y olor favorito en el mundo. Y ahí fue cuando lo vi, un chico alto como de 1.82, ojos color miel, tes clara, sus hermosos labios perfectamente simétricos color carmín, su pelo negro pero con un deslumbrante brillo , wow me quede inmóvil.  Era de los chicos mar hermosos que había visto en mi vida, obvio después de Harry Styles, y mis miles de chicos de libros, cuando me di cuenta que el iba acompañado de una chica rubia no tan alta, pero muy linda, pensé que son pareja perfecta.

De regreso a casa me perdí y llegue un poco tarde a casa, mi Tita estaba enojada pero al contarle lo que vi se asombro y me dijo que estaba feliz de que me fijara en chicos reales, yo solo reí.

Mi SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora