Capítulo catorce.

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Al día siguiente Soobin despertó a las siete de la mañana con una cabellera pelirosa sobre su pecho y unos brazos aferrándose a él como si solo eso importara

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Al día siguiente Soobin despertó a las siete de la mañana con una cabellera pelirosa sobre su pecho y unos brazos aferrándose a él como si solo eso importara.

-Yeonjunnie, es hora de despertar.- Aunque no quisiera, Soobin tuvo que mover al pelirosa para que despertara.

-Dame cinco minutos más- Yeonjun se quejó y se aferró aún más al cuerpo de su menor.

-Quiero jugar en la nieve.- El peliazul hizo un puchero y habló con la voz más tierna que tenía, el pelirosa no tuvo que mirarlo para acceder, sabía que le hacía mucha ilusión.

Yeonjun se levantó tallando sus ojos para aclarar su visión y lo primero que hizo fue tratar de despertar a Taehyun y Beomgyu, quienes dormían abrazados, el pelinegro acurrucándose y el de cabello rojizo abrazándolo por la cintura, lamentablemente tuvo que interrumpir esa linda escena.

Mientras tanto Soobin dudaba en despertar a Kai, el rubio era bastante exagerado con el tema de las horas de sueño. Juntó todo el valor que tenía y movió el cuerpo de su amigo con delicadeza.

-NingNing, tienes que levantarte.- El peliazul habló con un tono de voz muy suave, para su sorpresa Huening Kai despertó y de buen humor.

Los cinco chicos bajaron al comedor y Soobin como buen anfitrión intentó prepararles un desayuno decente.

Lo único que tenía en mente el peliazul era salir y disfrutar de la nieve que había caído, en cuanto terminara con su comida lo primero que haría sería salir a jugar como niño pequeño, y así fué, en el momento en el que terminó se levantó de su silla y se dirigió a la puerta, sin siquiera esperar a sus amigos, pero su camino fue interrumpido por un suave agarre en su muñeca.

-Soobin, sé que amas cuando nieva, pero si sales así podrías enfermarte y no quiero eso.- Aquellas palabras hicieron a Soobin sonrojarse, su mayor se preocupaba por él.

Yeonjun se levantó y sin soltar la muñeca de su menor fue hasta el perchero en donde había un gran abrigo, evidentemente de Soobin, y como si de un niño pequeño se tratase Yeonjun ayudó al peliazul a ponerse el abrigo, cuando terminaron el pelirosa llevó una de sus manos a la mejilla del otro y la acarició con suavidad, provocando en Soobin las ya conocidas mariposas en el estómago, aunque la actitud del pelirosa parecía demasiado extraña para todos.

-Creo que todos podemos salir y acompañar a Soobinnie.- Habló Kai, sacando de su burbuja a su hermano, recogió los platos de sus amigos y los llevó al fregadero para luego seguir hablando. -Felix dijo que vendría temprano hoy, así que supongo que no falta demasiado para que llegue.- Esas palabras fueron suficientes para poner a Yeonjun de mal humor.

My best friend brother. [Yeonbin/Soojun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora