𝐘𝐨𝐨𝐧𝐠𝐢'𝐬 𝐦𝐢𝐬𝐭𝐚𝐤𝐞 •𝒌𝒐𝒐𝒌𝒎𝒊𝒏• Au

•Tears, goodbye•

Para una mejor experiencia reproduzcan la canción para que echen la lloradita mientras leen 💗.

(Lo que se narra en este capítulo es completamente alterno a lo que sucedió en los dos capítulos anteriores, recuerden que cada relación lleva sus problemas  excepto el taegi ay que bonitos los novios)

La sorpresa había sido absoluta en el rostro de Jimin al ver a Jungkook frente a su puerta exactamente una semana después de aquella incómoda conversación donde muchas cosas salieron a flote removiendo una capa muy sensible para ambos.

El cabello de Jungkook lucía ligeramente salvaje y unos centímetros más largos de lo que solía recordar, también notó que no llevaba puesto su característico atuendo negro en cuerina, si no más bien, un suéter quizá una talla más grande que él mismo en un tono alegre y casi distópico para su imaginación, la prenda llegaba un poco más allá de sus jeans ajustados que se ceñían perfectamente a las largas y varoniles piernas, las manchas oscuras bajo sus ojos dejaban a la vista las molestas ojeras que el desvelo le había provocado, pero aquella sonrisa primaveral seguía allí, como si el veneno de todas sus palabras crudas no pudiese afectar su noble mirada.

─¿Jungkook? ─su voz sonó agitada por la emoción y el rencor, pero su agrietado corazón se sintió feliz de que esos ojos hogareños estuvieran suplicando su cercanía una vez más.

Jungkook le ofreció una media sonrisa, una cálida pero al mismo tiempo herida.

─Jimin ─respondió con esa voz lastimera y los ojitos brillantes que lo desestabilizaban, él solo estaba allí de pie pidiendo permiso con la mirada después de varios días causando que Jimin sintiera su corazón a punto de salírsele del pecho.

Por un momento Jimin le permitió a su pulso disprarse como un proyectil, pero los recuerdos de su orgullo herido y la ira de la vieja discusión lo hicieron soltar una risa nostálgica antes de responderle.

─Esto debe ser una broma ─el tono cariñoso era cambiado por sus ojos enfurecidos y por la rabia que carcomía su cabeza, aprovechado de su dosis de valentía intentó cerrar la puerta en la cara del pelinegro pero las botas astutas de Jungkook fueron más rápidas al interponerse entre la madera y él.

─Realmente necesitaba verte, no nos hagas esto ─intentó tomar las manos del rubio pero este rápidamente lo alejaba de un manotazo.

Un suspiro hastiado salía de los labios de Jimin antes de parar el forcejeo para mirar nuevamente a Jungkook mientras le lanzaba una mirada dura e inquebrantable.

─Ya deja de mentir, ya se cayó tu fachada, Jeon ─habló.

─Deja que te explique todo con tranquilidad, Mimi ─«Mimi», traicionado por sus recuerdos, un retorcijón parecido a la emoción aparecía en el estómago de Jimin haciéndolo titubear frente a Jungkook y este lo notaba.─Por favor... ─pedía nuevamente.

Jimin lo pensó por varios segundos sin relajar la mirada y en contra de su voluntad alejó sus manos de la puerta para dejar de sostenerla.

─Ni si quiera sé porqué estoy cediendo pero tienes una última oportunidad para hacer bien las cosas, solo una ─se hacía a un lado y Jungkook entraba asintiendo en tanto que Jimin se encargaba de cerrar la puerta detras de él y tomaba aire para volver a encararlo ─y no me digas mimi ─completaba.

Jungkook asentía feliz y su pelito sedoso se movía al compás de su euforia por volver a ver las pequeñas pecas tímidas de Jimin bailar sobre sus mejillas.

─¿Puedo sentarme? ─preguntó apuntado el sillón a pocos pasos de ambos.

Jimin se cruzaba de brazos y contraatacaba.