Coniunctum (Voiles)

Capítulo 2

Stiles se detuvo delante de la puerta de la casa donde hacía tres días había dejado a Rhys, había tardado en procesarlo todo y acabar decidiendo sabiamente. Stiles entró a la casa encontrándose la luz de la cocina encendida, Rhys se giró mirándolo con una sonrisa mientras sacaba su dedo de la boca. Stiles se quedó helado al ver al demonio solo con unos pantalones cocinando. Gracias a eso pudo ver con claridad todas las cicatrices que el torso del demonio albergaba.

- No te esperaba tan pronto.- Dijo Rhys volviéndose a centrar en su comida, Stiles se mantuvo en su sitio respirando de forma calmada mientras intentaba que su mirada no se perdiera en la espalda del rubio.

- Lo he estado pensando, y solo me queda una duda para decidirme del todo.- Dijo Stiles tenso, Rhys sonrió aprovechando que el humano no lo veía. Ya se imaginaba que pregunta haría, el único detalle que no comentó la ultima vez que se vieron.- ¿Cómo se llevará a cabo la unión?- Rhys apagó el fuego poniendo la comida en un plato con parsimonia, notando lo nervioso que se ponía Stiles por minutos.

- Hay dos maneras.- Dijo el demonio mientras se giraba comiendo lo que había preparado, Stiles mantuvo su mirada en los ojos del demonio para no descentrarse.- Una es totalmente indolora, incluso placentera. Y la otra es horrible.- Dijo sentándose en uno de los bancos delante de él y mirándolo divertido.- La primera es la que te has imaginado, follando.- Dijo consiguiendo que Stiles tragara saliva apartando la mirada sonrojándose levemente.- La segunda es mediante un hechizo, es difícil y doloroso para los humanos.- Dijo Rhys mirándolo con una ceja alzada, Stiles apretó su puño mientras se acercaba para sentarse en las escaleras.

Se tapó la cara intentando sopesar las opciones, el hechizo era tentador, pero el tema de que fuera doloroso le tiraba para atrás. La primera opción era la mejor, pero tenía el pequeño problema de ser virgen. ¿Cómo iba a decirle al demonio que era virgen? Estaba seguro de que este se reiría de él en su cara.

- Los vírgenes aumentan la posibilidad de éxito. Así que si lo único que te molesta es eso no debes preocuparte, seré gentil.- Dijo Rhys divertido mientras mordía el tenedor sin quitarle los ojos de Stiles. Este destapó los suyos sorprendido mientras lo miraba confundido.- Estabas pensando muy alto.- Susurró el demonio sonriendo, Stiles rascó su cabeza mientras comenzaba a arrepentirse de su decisión.

- ¿Cuándo lo hacemos?- Rhys sonrió dejando el plato de lado y acercándose a Stiles cogiéndolo a pulso y subiendo las escaleras.

Stiles abrió la boca sorprendido antes de comenzar a sonrojarse viendo la sonrisa del demonio. Rhys lo dejó en la cama mientras se acercaba a cerrar las cortinas de la habitación. Stiles quiso hablar, preguntar como lo haría, que harían. Pero el demonio lo dejó mudo cuando este dejó salir dos alas de color negro. Stiles tragó saliva sintiéndose sucio al estar poniéndose caliente con eso, los ojos de Rhys brillaron unos segundos antes de detenerse delante del chico y comenzar a desvestirlo. Quitó las prendas más superficiales como los zapatos y la sudadera. Stiles humedeció sus labios sintiéndolos demasiado secos. Rhys se rio contra el oído de Stiles provocando un escalofrío.

- Seré bueno, te lo prometo, solo déjame llevar el mando.- Stiles asintió notando como sus pantalones se deslizaban por sus piernas quedando también fuera. Rhys le quitó su camiseta antes de empezar a repartir besos por el cuello y el pecho de este, buscando que el humano se relajara para poder hacer eso fácil para ambos.- Si te relajas será muy bueno Stiles.- El humano miró a Rhys que estaba a centímetros de su pezón.- No sentirás nada malo, te lo prometo.- Susurró el demonio antes de morder con suavidad el pezón de este provocando que Stiles gimiera sorprendido.

Rhys sonrió divertido al ver que tenía al humano bajo su yugo. Bajó su lengua hasta el borde de la ropa interior y miró las mejillas sonrojadas de este. Las manos del demonio bajaron la última prenda dejando al humano totalmente desnudo ante él. Rhys metió dos de sus dedos en su boca mientras veía a Stiles intentándose tapar. El demonio negó antes de levantarse quitar sus pantalones y ropa interior, Rhys se posicionó entre las piernas del chico antes de meterse la erección de este en su boca provocando que este temblara de placer. Rhys aprovechó ese momento para acariciar la entrada de Stiles, este abrió los ojos asustado antes de bajar la mirada a Rhys que seguía chupando su polla. Rhys metió el primer dedo viendo como Stiles se tensaba quejándose, el demonio se detuvo y pasó la lengua por la polla de este antes de subir un poco sin sacar el dedo de Stiles.

- Tienes que relajarte.- Susurró el demonio contra los labios del chico viendo su ojos llenos de lágrimas, Stiles asintió mientras respiraba hondo relajándose, Rhys dobló su dedo tocando la próstata de este, ganándose un gemido de sorpresa.

Rhys se acercó y besó los labios del chico antes de meter el segundo dedo, mordió el labio de Stiles consiguiendo que se centrara en el dolor de su labio y no en el otro, Rhys volvió a tocar la próstata de este notando como la polla del humano daba un pequeño espasmo. El demonio lo dilató mientras lo besaba, estaba sorprendido de la capacidad de Stiles para relajarse y dejarse hacer. Este sacó sus dedos del chico y se alineó sin separarse mucho de la boca de este, Rhys entró con suavidad distrayendo a Stiles con besos en el cuello, cosa que al humano le sirvió. Rhys se detuvo dejando que este se acostumbrara a su tamaño.

- ¿Cómo te atraparon?- Preguntó Stiles cerrando los ojos mientras hacía una mueca de dolor, el demonio al darse cuenta de que estaba intentando distraerse sonrió poniéndose a la altura de su cara.

- Yo había subido a por el alma de un obispo, los franciscanos me esperaban, no tuve mucha opción.- Susurró Rhys mientras acariciaba los muslos de Stiles, este asintió con suavidad mucho más relajado, Rhys dio una estocada suave ganándose un gemido de este.

Rhys se separó de Stiles comenzando un vaivén suave, Stiles estaba sorprendido de lo bien que eso se sentía, Rhys aceleró las estocadas gradualmente, consiguiendo que Stiles en ningún momento se quejara o se sintiera incómodo, procurando que todas las estocadas dieran o rozaran la próstata de este. Stiles no tardó mucho en correrse, el demonio sonrió sin dejar de dar estocadas, aún podía conseguir que Stiles corriera una segunda vez. El demonio le dio la vuelta dejándolo a cuatro mientras entraba de nuevo dando estocadas duras y precisas, consiguiendo que Stiles temblara mientras sollozaba agarrándose a las sabanas.

- Ya me he corrido.- Dijo Stiles antes de gemir apretando su frente contra el colchón.- No voy a poder correrme más.- Rhys se rio levantando un poco y dejándolo pegado a su pecho sin dejar de dar estocadas.

- Créeme, te vas a correr otra vez.- Susurró antes de morder con suavidad el hombro de este, Stiles gimió sintiendo su polla comenzar a ponerse dura de nuevo.

El demonio se rio acariciando los pezones del chico mientras éste temblaba ya sobrepasado por todo lo que sentía. El demonio pellizcó el pezón de este consiguiendo que Stiles se corriera de nuevo. Rhys gruñó contra el cuello de este corriéndose dentro del chico notando como el alma de este se unía a él. Stiles dejó salir un sollozo mientras caía sin fuerzas contra el demonio, este salió con cuidado del chico lo dejó tumbado mientras él sonreía acariciando su pecho.

- ¿Te vas?- Preguntó Stiles más dormido que despierto, Rhys lo miró unos minutos sin decir nada, cuando supo con seguridad que Stiles se había dormido hizo aparecer un colgante lo dejó en la mesilla junto una nota explicando que era y que consecuencias tiene el vínculo que habían hecho. Sin decirle nada el demonio se fue.

Stiles se despertó después de un par de horas dándose cuenta de que estaba solo, miró alrededor sin ver la ropa del demonio, vio el colgante y la nota, así que con algo de dolor se arrastró hasta ahí cogiendo la nota.

"Hola Stiles, siento dejarte solo pero debo marcharme.

Aquí te dejo un colgante con el que podrás llamarme o hablarme, ahora que estoy libre no tengo esa conexión de poder hablar en tu cabeza, pero con este colgante si podremos.

Otra cosa que debería haberte comentado pero que no tuve corazón fueron las consecuencias de hacer este vínculo. A partir de este momento te has convertido en lo único que me hace débil, así que si nadie lo sabe estarás a salvo, pero si alguien lo descubre estarás en peligro. Nunca dudes en llamarme y aunque no responda siempre estaré pendiente de ti.

Nos volveremos a ver, Rhys"

Stiles negó con pena mientras se levantaba y se vestía guardando el colgante en su bolsillo, aún no estaba preparado para hablar con el demonio. Él había esperado verlo cuando se despertara a su lado, no despertarse solo y abandonado.