Inspirado en : La bendicion del oficial del cielo
La luna brillaba con intensidad, iluminando el frondoso bosque por el que cruzaba esa carabina de 40 personas, acompañando a la nueva esposa del rey.
La princesa Sang, de la familia Kim, observaba su alrededor dentro de su pequeño carruaje de colores rojos y dorados, fijándose en cada detalle. Todo era tranquilidad, hasta que los gritos de sus secuaces se hicieron presentes. La princesa no se movió, hasta que una mano abrió su puerta....
???: Y eso fue lo que pasó. - acabo de explicar el mercader. - No volvió nadie, igual que las últimas veces que fueron esposas por ese bosque.
La muchacha desconocida asintió, apuntando todo lo que decía el mercader. Con una sonrisa se despidió, y se acercó a sus acompañantes.
Namjoon : ¿Has encontrado alguna cosa relacionada con los incidentes, t/n?
-No realmente, todos dicen lo que ya sabemos. Un ser desconocido se está llevando a las esposas del rey. Por lo que me dicen es un espíritu vengativo. No deja a nadie volver. Está haciendo que el rey se impaciente, y eso....
Suga : Y eso es un problema para ti, no?
- Teniendo en cuenta que soy la mano derecha del rey, si. Mi deber es que el rey esté feliz. Por eso mismo, iremos a la montaña esta noche.
Suga : Pero, teniendo en cuenta que solo ataca a las carabinas junto a una futura esposa del rey....
- Tranquilos, yo seré la esposa.
Ambos acompañantes la miraron horrorizados. Cómo podía decir semejante estupidez? (t/n) (t/a), a su corta edad, había hecho logros inigualables. Una guerrera que se desempeña estupendamente en batalla, nadie podía con su ingenio y velocidad. Una de las más inteligentes y más amables de todo el reino.
Por otro lado, su tozudez era algo de lo que todo el mundo era consciente. No había nadie que la detuviera, y ellos eran conscientes de ello. Aun así, intentaron persuadir su idea, diciéndole que podrían poner en su lugar a un muñeco o a una aldeana. Sin embargo, ella se negó.
Cuando cayó la noche, la muchacha ya llevaba los ropajes que solían llevar las futuras esposas del rey. Un delicado vestido rojo con accesorios dorados, su pelo era recogido por una pinza del mismo color que los accesorios y su rostro era tapado por un fino velo del color de la sangre.
Antes de entrar al carruaje, miró por última vez a sus acompañantes, demostrándoles una sonrisa para tranquilizarlos, lo que no funcionó en absoluto.
Suga : estaremos a ambos lados del carruaje, si ocurre algo fuera de lo normal o vemos que estas en peligro, intervendremos de inmediato.
- No será necesario, tenlo por seguro.
Dicho esa frase, la muchacha entró en el carruaje y cerró la puerta, quedando aislada de todo. Emprendieron camino, siguiendo el camino que cruzaba el bosque.
Nueva novia
Una voz femenina empezó a retumbar por todo el bosque, haciendo que todos dejaran de caminar de golpe.
Nueva novia
Suga : Que es esa voz?
La nueva novia en el palanquin rojo
Los rugidos de los lobos se empezaban a escuchar, los acompañantes empezaron a agitarse, sin saber qué hacer.
llena de lágrimas, por las colinas
Namjoon : esto no me gusta, t/n, tenemos que regresar.
Bajo el velo, nunca sonrías.
La voz seguía escuchandose, cada vez más intensamente. Las bestias se estaban enfadando y empezaban a mostrar sus dientes amenazando a todos los presentes.
- Debéis iros, yo me encargaré del espíritu. Es una orden.
Ambos chicos se miraron enfurecidos, y salieron corriendo junto a los demás, dejando a la supuesta esposa sola, en el camino. Los lobos dejaron de gruñir, y unos pasos se hicieron presentes.
La puerta se abrió y una mano se extendió delante de la muchacha. Las uñas del sujeto eran largas y filosas, pero por alguna razón, le parecían cálidas. t/n extendió su mano, uniéndola con la del espíritu. Este, jalo de ella, sacándola del carruaje y apegándose a su pecho. El espíritu fijó su mirada en los orbes de la chica. Sonrió enseñando sus dientes de conejo, haciendo que sus ojos se hicieran más pequeños.
??? : No debería estar aquí, señorita. Se rumorea que hay un ser que secuestra a bellas mujeres.
El fantasma abrió un paraguas de tonalidades rojas, cubriendo la cabeza de la chica y la suya.
??? : Permítame acompañarla hasta un lugar seguro.
La muchacha empezó a caminar junto al fantasma, sin ser soltada por este y sin dejar de mirar su rostro. Escuchaba como gotas caían encima del paraguas, pero no le dio importancia. El fantasma de vez en cuando mantenía contacto visual con la chica y le sonreía, haciendo que su corazón latiera con rapidez.
No fue hasta que miró hacia el suelo, que vio charcos de sangre a su alrededor.
- Disculpa, a donde vamos?
El fantasma no respondió, mantuvo el silencio hasta que llegaron al templo. La muchacha le dio la espalda durante unos segundos, y cuando volteo ya no estaba.
Suga : t/n!!!!!!!!
Namjoon : Estás bien? Cómo has llegado aquí?
La muchacha no contestó, siguió con su mirada fija en el lugar donde el muchacho había desaparecido.
Quien era?
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Hace mucho tiempo, en un reino ya perdido, se desató una guerra devastadora entre plebeyos y realeza. Uno de los plebeyos, horrorizado por lo que sus jóvenes ojos veían, corrió hasta el templo más cercano, pidiendo ayuda a los dioses.
??? : Porfavor, dios de este templo, le ruego que me ayude
Repitió y repitió. Pero nadie le ayudó.
Cuando el niño, decidió volver a su pueblo, pero ya era demasiado tarde. No quedaba nadie, solo los soldados de la realeza, celebrando la muerte de todos los plebeyos.
Del cielo empezaron a caer leves gotas de sangre pura. El niño agarró un cuchillo que sostenía el cuerpo inerte de uno de los suyos, y miró fijamente a los ojos de los soldados. Los soldados lo miraron con asco y repudio, preparados para matarle.
Ese día, el único superviviente fue....
el espíritu de la lluvia roja.
