Vientre En Alquiler ↳𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧↲

Primer Encuentro

La pareja frente a Harry lo inspeccionaban de arriba abajo una y otra vez, entonces la expresión seria que tenía la omega en su rostro se suavizó un poco dándole una pequeña sonrisa

—Buenos días señor Potter, nos alegra recibirte pasa adelante

El alfa detrás de ella solo mantenía una expresión indiferente en su rostro mientras observaba atentamente cada movimiento que hacía desde que puso un pie dentro de la mansión, la pelinegra había sido muy amable en guiarlo a la sala principal donde los tres estuvieron sentados en los sofás

Sus nervios no le estaban ayudando en ese momento, su seguridad estaba en el piso ¿Cómo era posible que hubiera sido seleccionado para Gryffindor si era un cobarde? La mirada gris del alfa estaba pegada en el, tal vez buscando hacerle un agujero en su cráneo o algo así

Finalmente luego de la inspección a fondo del rubio y el silencio incómodo el alfa se digno a hablar

—Así que tu eres el único omega que hay, Harry Potter

Harry miró al alfa, no entendía, a la hora de decir su nombre ¿Lo había dicho con desprecio?

—Uh... Está en lo correcto señor Malfoy, en este momento soy el único disponible, pero si prefiere esperar unos 6 o 7 meses adelante, está en su derecho —dijo Harry reuniendo toda la valentía que pudo

Y luego de ese super momento Gryffindor el alfa lo miró como si quisiera degollarlo

—No te atrevas a ser un insolente, estás en mi casa

—Draco ya cálmate —dijo la omega al sentir las feromonas llenas de furia que soltaba el alfa

¿Qué rayos era lo que le pasaba a ese tipo? Apenas y se habían hablado y ya parecía odiarlo para toda la eternidad, Harry se sentía completamente indignado, molesto. Entonces se topó con la mirada llena de compresión de la omega que lo hizo contar hasta 10 y calmarse un poco

—Por favor, nosotros de verdad queremos un cachorro, pero después de ese terrible accidente me es imposible ahora

—Puedo comprenderlo

Harry estaba completamente seguro de que Astoria sería una buena madre, se notaba en sus ojos el anhelo, podía estar seguro de que su cachorro estaría bien en sus manos, del que no estaba seguro era de Malfoy, era grosero, malhumorado y no dejaba de verlo con desprecio desde que pisó la mansión

—Iré por un poco de té, siéntase como en su casa señor Potter —dijo Astoria mientras daba la vuelta

Draco la miraba extrañado, podía pedirle a un elfo doméstico que lo hiciera, mientras que Harry le rogó con los ojos que no lo dejara a solas con ese rubio, le iba a cortar la yugular sin pensar

La sala principal de la mansión se sumergió en un silencio totalmente incómodo para ambas personas ahí presentes, Harry inspeccionó el hogar de los Malfoy, bueno, almenos esa parte donde estaba y pudo ver en uno de los sofás desocupados varios libros, entre ellos "Cachorros y su cuidado" y "Pequeños primeros pasos". Estaba enternecido por el hecho de que se estuvieran preparando para la llegada de el cachorro, probablemente si sería un buen hogar para su pequeño después de todo

—Harry Potter —murmuró el rubio haciendo que Harry volteara a verlo—. Gryffindor, estuviste los primeros seis años y desapareciste en el séptimo después de la muerte del director, no sabía que eras un omega, ni tampoco que te vería nuevamente —el rubio tenía los brazos cruzados

Entonces Harry abrió la boca, con razón el apellido se le hacía conocido, Draco Malfoy había sido uno de los más insoportables y molestos seres que había en el planeta justo debajo de los mosquitos ¿Cómo se había olvidado de la existencia de ese rubio?