destino

Capítulo 5

JULY
La cena estaba espectacular.
Se notaba que Alexia sabía mucho de cocina y que le encantaba todo lo relacionado con ella.
Con la barriga casi a punto de estallar de todo lo que había comido, le di las buenas noches a Alexia y me fui directa a mi habitación ha hablar con mi madre.
Ni siquiera me dio tiempo a llamarla, de lo intenso que fue el día.
Un rato después le había contado a mi madre con todo detalle mi día y que estaba muy cansada, y no me entretuvo mucho más.
Me fui al baño para asearme antes de acostarme y fui directa a la cama.
Y agobiada con el compañero que tenía enfrente de mi habitación, me costo conciliar el sueño.
Traería problemas, estoy segura.

Mis pensamientos acertaron cuando escuche ruidos en el techo.

"Pero ¿qué?"

Me asome por la ventana de mi cuarto que daba al jardín e intenté mirar que o más bien quién estaba en el techo.

Y no me equivoqué, asomando la cabeza un poco más de la cuenta pude ver a Blake fumando encima de mi habitación. No daba crédito a lo que estaba viendo, ¡se podía matar!

De repente parece ser que se percató de mi presencia ,pues me miró con cara de pocos amigos.

_.¿Qué miras? Metete en la habitación antes de que me cabrees._

Impresionada por su respuesta me limite a abrir mucho los ojos y meter la cabeza con intención de seguir sus instrucciones.

Pero...¿Cómo se atrevía a mandarme si ni siquiera me conocía?
Asomé la cabeza de nuevo.

—¿Qué coño te hace pensar que puedes mandarme?.—
Me crucé de brazos, si iba a tener que convivir con él un año no se me iba a subir tan rápido encima,tenía que marcar territorio.

Pude ver en su cara que le sorprendió mi desobediencia.
—¿Y a ti que me puedas llevar la contraria?.—
dijo incrédulo
Mi espalda se tensó al instante y su mirada me daba a entender que no continuase por ahí.
Odiaba la prepotencia y el era un claro ejemplo de ella.
Le dediqué una mirada de asco involuntaria y me metí en la habitación,cerré la ventana de un portazo dando a entender mi cabreo y me metí en la cama con intención de escribir en mi libro.
Realmente es un diario pero no lo definiría exactamente así.
Sin esperarlo me dormí con mi libro entre las manos.