Gorda gorda gorda gorda...
Es complicado pasarte una buena parte de tu día pensando en cómo te ves, cómo la gente te ve, que tan gorda estás, si lo que comiste te subió de peso, contando calorías, dejando de comer lo que te gusta. Es frustrante esa pelea que se lleva a cabo cuando comes algo que sabes que no debías de comer: "¿voy a vomitarlo o no?" "¿voy a vomitarlo o no?" "Prometí no volverlo a hacer" "¿y si lo hago una sola vez más?" "Sé que me lastimo pero si no lo hago seré más gorda".
Hay personas que lo niegan, personas que me dicen que estoy bien, incluso otras, que me veo delgada...¡Já! ¿delgada de dónde, por Dios? y ¿bonita? ¡pff! Incluso, aunque alguno de esos comentarios sea cierto, creo que no podría para nada creérmelo, porque al verme al espejo, mi opinión de mí misma difiere mucho de aquellas.
A veces, resulta algo triste verse al espejo y solo ver defectos: una lonjita por aquí, una espinilla por allá, un pelito acullá, demasiado cachetona, dientes astillados, grasa en todas partes de mi cuerpo...
No siempre me siento así. Ha habido ocasiones en las que realmente me gusta lo que veo: mi cabello largo, ondulado y negro; mis enormes ojos a los que gran parte de las personas halagan; la forma de mis cejas, mi estatura y lo pequeña que soy en comparación con la mayoría de hombres; los labios delgados y finos; mi nariz pequeña; Cómo me veo con algunos cambios de ropa.
A veces, soy una chica segura de mi misma, que se siente capaz de andar por la vida sintiendo que se ve bien, que realmente la gente piensa que se ve bien. A veces, tengo la seguridad necesaria como para coquetear con algún chico, y una vez que veo que no me rechaza por lo que yo considero mis "defectos" puedo tomar más confianza. A veces, me pregunto cómo es que si hay algunos chicos que se fijen en mí, ¿Qué me ven? No soy bonita como para que se fijen en mí ¿Entonces? Si tienen amigas más bonitas ¿Por qué escogerme a mí, que soy fea?
Y, hay otras ocasiones en las que me siento tan mal por mi apariencia, tan mierda, que lo único que veo es lo gorda que me veo con toda mi ropa. Siento como si la ropa me quedara más ajustada que antes, como si incluso mi cabello conspirara en mi contra y se viera mal para hacerme ver aún más mal. La báscula lleva meses marcando el mismo peso, pero siento que miente. Muchas veces me detengo a comprobar si está bien, si no se ha descompuesto o no está mal calibrada, pero todo está en orden. ¿Entonces por qué sigue marcando lo mismo si frente al espejo me veo más gorda?
Soy una persona tan seguramente insegura. He aprendido a ignorar las cosas que dicen las personas, a que me valga lo que piensen de las cosas que hago y a ser yo misma y no cohibirme por nada ni nadie, pero eso no significa que, aunque ignore la mayoría de comentarios sobre mí (como que soy una acosadora, loquita, carilla; cosas sobre mi carácter y personalidad) no puedo evitar sentirme mal con los que van directamente con mi físico. Ningún comentario cala tanto como esos. No todos calan, pero si la mayoría. Incluso, si son solamente pequeños comentarios insignificantes. El que parezca una persona segura de sí misma, no significa que lo sea.
He intentado dejar de comer nuevamente, como un par de veces lo llegué a hacer (y funcionó) Pero no puedo, ya no. Porque, una parte de mi realmente quiere seguir comiendo y otra parte más fuerte me repite una y otra y otra vez el daño que me hago. En verdad me quiero como para seguirme lastimando de esa forma. Siempre intento cuidar de mí lo mejor que puedo, y dejar de comer, o vomitar solamente me daña.
Si hubiera nacido hace un siglo, hubiera encajado con lo que se consideraba belleza en aquél entonces: mujeres robustas, imperfectamente hermosas. Con curvas por todo su cuerpo, sin tener que hacer dietas rigurosas o morirse de hambre para que las personas las consideraran hermosas.
Pero la sociedad ha cambiado, si hoy, no usas una talla 5 o menos de pantalón, eres una gorda. En todos lados, esparcidos por los medios masivos de comunicación, ves a los nuevos estándares de belleza atacándote por todos lados: mujeres bellas y delgadas en los comerciales, en las paradas de autobuses, publicitares, en las películas, en las revistas... todo termina siendo tan abrumador, que no puedes evitar empezar a compararte con ellas y sentirte más mierda de lo que ya te sientes.
Y a los chicos... siempre está esa teoría de que las prefieren llenitas a delgadas, aunque aún no estoy muy segura de si eso es cierto o no. Nunca me he puesto a preguntarle a los chicos si es verdad, pero lo que he visto, es que prefieren, obviamente, a las bonitas, delgadas y estilizadas, no a las llenitas, que no se visten como divas y no son tan bonitas. A veces creo que esa teoría de que las prefieren llenitas es solamente para hacer sentir mejor a las chicas gorditas y, con eso, evitar que caigan en algunos de los desórdenes alimenticios que, poco a poco, se han estado volviendo los mejores amigos de las chicas de hoy.
En ocasiones, me detengo a observar a las otras chicas, mirando lo bonitas que son y cómo se ven bien con todo. Cómo todos los chicos las miran y cómo ellas son tan seguras de sí mismas, preguntándome porqué no soy así, porqué no pude ser como ellas. También, miro a las chicas menos privilegiadas, a las que verdaderamente tienen obesidad, a las que tienen algún defecto más notorio que los míos, a quienes verdaderamente se les puede llamar "feas", teniendo en cuenta los estereotipos de la belleza moderna, y es cuando agradezco un poco que, al menos, no soy como ellas. Que al menos, puedo pasar por una chica normal, aunque no tan agraciada. Pero eso no es suficiente, no me hace sentir bien que sea mejor que algunas chicas en ciertos aspectos, lo que verdaderamente me haría sentir bien sería ser delgada y linda, como aquellas chicas que ves en la televisión, en las revistas o paseando tomadas de la mano de sus guapos novios.
Gorda gorda gorda... parece que el espejo buscar hacerme sentir mal la mayor parte del tiempo... Una parte de este trauma a las apariencias, es el miedo que me da ser rechazada por cómo soy. No por quién soy, sino ser rechazada por lo que físicamente soy... antes, realmente estaba mucho peor de lo que soy ahora. Y, siempre sentí cierto rechazo por parte de los demás niños que me rodeaba. ahora, después de algunas dietas, desórdenes alimenticios y 14 kilos menos, si, he mejorado un poco, ya no siento ese rechazo, he tenido varios pretendientes, he besado chicos guapos... pero creo que ese trauma, no es algo sencillo de quitar, no, cuando se tiene el miedo de regresar a estar y sentirse en una situación semejante a las de aquellas épocas. Aquellos tiempos dónde era más gorda y fea. No se puede quitar un trauma tan fácil cuando, aún a pesar de mejorar, se sigue sintiendo cómo estoy muy lejos aún de llegar a esos estúpidos estándares de belleza deseados...
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Frente al espejo
Random"Dicen que el peor de nuestros enemigos son nuestros propios pensamientos"