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3 de septiembre año 2002.

-Es muy lindo no crees?, Parece un pequeño muñequito de porcelana.

Un hombre algo alto y fornido susurro con cuidado de no hacer ruido, mirando al pequeño bebé dormido en su cuna sonrió encantado, este no hacía más que respirar con tranquilidad y de vez en cuando mover un poco sus pequeñas manitas, se veía tan despreocupado de todo lo que pase a su alrededor

-Es bonito... Y pequeño... Se nota que será un bonito chico cuando crezca.

El joven de tan solo diecisiete años, miró con atención y detenimiento al pequeño bebé de tan solo tres días que yacía en la cuna, le parecia tan solo un muñequito, si no se moviera ni un poco pensaría que estaba viendo a un muñeco de porcelana, el mayor de ambos simplemente sonrió ante aquella vista , le agradaba la idea de que su pequeño hijo y el chico al que le tiene más confianza, en un futuro fueran buenos amigos.

El simplemente estaba feliz de poder por fin tener un hijo y que fuera varón, había deseado por tanto tiempo junto a su esposa tener un bebé, y ahora que la luna por fin se los había concedido, realmente estaba agradecido por recibir tal felicidad, Al ser el líder de aquella manada, esperaba con ansias que su pequeño hijo fuera un potente alfa en su futuro y que tomará tal vez su cargo junto a Zhan, quería que lo fuera. Pero ahora que veía aquella complexión tan delicada, tan fina y detallada, y por si fuera poco la mirada que Zhan le daba, esa atención, no era algo malo precisamente, pero el moreno era un Alfa y eso lo hacía dudar de ello, claramente aún no podía saber la posición de su pequeño, pero mentiría si dijera que no le preocupaba.

El más menos de ambos poco a poco empezó a abrir sus pequeños ojos, parpadeando ligeramente al sentir mucha luz, abrió su pequeña boca y bostezo unos segundos antes de empezar a contemplar todo, con muy torpes movimientos y una vez que se acostumbro a la luz, miró a la persona frente a él, Xiao Zhan, quien tampoco dejaba de verlo, siendo el la primera persona que miró en lo que llevaba de vida, el pequeño parpadeo un par de veces antes de dejar salir una muy poco visible sonrisa.

-¿Como se va a llamar, señor Wang? - Xiao Zhan preguntó sin quitar la vista de el pequeño, quien ahora también lo miraba apenas con los ojos un poco abiertos.

-Yibo... Mi pequeño Wang Yibo.

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El Alfa Que Tomó A Su... ¿Alfa? _YiZhan _Donde viven las historias. Descúbrelo ahora