Inefable

Capítulo 3

¿Sabéis esos momentos de la vida en los que dices tierra por favor trágame? ¿Si? Pues este es uno de esos momentos. Realmente no me puedo creer que acabo de chocar con Eros y con Sofia. Los "reyes del instituto", y por si os lo preguntáis, si, ese nombre se lo han puesto ellos mismos.

En cuanto me doy cuenta de que me he quedado tirada en el suelo mientras me pierdo en mis pensamientos, me apresuro a recoger los libros que se me han caído y me levanto mientras Sofia me mira despectivamente.

– Lo siento – susurro a la vez que intento pasar por su lado. Pero Sofia me coge del brazo para que no pueda irme.

– ¿A dónde crees que vas tan rápido? – me pregunta ella. Pero sinceramente prefiero quedarme callada y no responder.

– ¡Oye! ¡Te he hecho una pregunta! ¡Respóndeme! – grita Sofia. Pero de la misma forma que antes, prefiero quedarme callada y no entrar en sus juegos

– Cariño, puedes decirle a esta estúpida nerd que me responda. – le pregunta dulcemente a Eros girándose para mirarlo.

– ¿Realmente te importa lo que tenga que decir? Porque yo creo que no deberíamos desperdiciar nuestro tiempo de esta manera. – Responde él relajadamente mientras mira su móvil sin prestarme la menor atención.

– Tienes razón. ¡Venga nerd, ya lo has oído! ¡Lárgate! – me dice igual de histérica que antes.

Después de este desagradable encuentro me voy a mi taquilla y posteriormente me dirijo a la salida donde me encuentro con mi hermano para irnos a casa.

Por el camino vamos hablando sobre que tal nos ha ido el día y sobre los deberes que nos han puesto. A la vez que hacemos alguna broma sobre los profesores que tenemos.

Cuando llegamos a casa, vamos a la cocina a comer. Y mientras yo caliento la comida que nos han dejado nuestros padres ya preparada, Aaron pone los cubiertos y los vasos en la mesa. Cuando terminamos de comer, Aaron se va a hacer los deberes ya que al cabo de un rato se tiene que ir al estudio.

Como yo esta tarde quiero llegar un poco antes al estudio también me voy a hacer mis deberes. Mientras termino mis deberes de química oigo la puerta de casa y voy a saludar a mi madre que acaba de llegar del trabajo. Mi madre trabaja como diseñadora de moda, y realmente es muy reconocida internacionalmente, y es por eso llega tan tarde de trabajar. En cambio mi padre trabaja como forense y estas últimas semanas ha estado muy ocupado con  un caso muy importante. Por eso no me extraña que hoy llegue tan tarde.

– Hola mamá – la saludo mientras salgo de mi habitación.

– Hola Lyss ¿Cómo te ha ido la mañana? – me pregunta mientras deja el bolso y la chaqueta.

– Bastante bien, ¿y a ti? – le digo alegremente.

– Bien, aunque con bastante trabajo – responde suspirando y yendo a la cocina a comer. – Por cierto, ¿Me podrías hacer un favor? – me pregunta mientras se sienta en la mesa.

– Claro, ¿Qué pasa? –

– Podrías ir hoy tu a buscar a Nora y llevarla a su clase de boxeo. Es que hoy voy a tener que llevar a Aaron al estudio de baile y no me da tiempo a hacer las dos cosas. – me explica.

– Of corse. Ya sabes que no tengo problema con eso. – le respondo. 

Y por si os lo preguntáis, si, mi adorable hermanita de 9 años hace boxeo. Así que mejor no meterse con la peque de la familia.

– Muchas gracias – me agradece mi madre.

– De nada. Pero ahora me voy a terminar los deberes que sino no me va a dar tiempo a hacerlo todo.–