Breaking the Rules +18

capítulo 27

Luego de una semana, tuvimos que volver a el internado. En estos días no le he hablado a Taehyung a menos que fuese necesario. Aunque ha intentado hablar contigo en varias ocasiones no he querido escucharle.

— Hogar, dulce hogar —gritó Sook sentándose en mi cama—

— Cama, dulce cama —la imitó Yuri lanzándose sobre la cama—

— Esa es mí cama Yuri

— Oh vamos, si sabes que duermo más aquí que en la mía

— También es verdad, gorrona —solté una risilla— Toma —le lancé un bote de crema humectante— A ver si se te quita la cara de gamba —Sook soltó una carcajada—

El día antes de volver Yuri quiso quedarse a broncearse luego de comer pero se quedó dormida hasta que comenzó a anochecer que Sook fue a buscarla. El Sol solamente le irritó la piel dejándola roja.

— No le veo la gracia —se fue a su habitación con una pequeña sonrisa que trataba de disimular—

— Yo también me voy, tengo que desempacar muchas cosas

Me lancé a la cama luego de quedarme sola. Mientras miraba el techo llegó el recuerdo de Kim y Luna, me sentía traicionada y furiosa cosa que no debería ser porque al final no somos una pareja. Sin duda esto se me había salido de las manos, estaba celosa, demasiado para ser sincera y eso no era buena señal. Me estaba enamorado de Taehyung, si de por sí ya era complicado lo que actualmente teníamos una relación de pareja lo sería aún más.

Ni siquiera sabes si él siente lo mismo estúpida

Joder, es cierto. El sonido de una notificación me sacó de mis pensamientos. Un mensaje de ShinHoo.

ShinHoo:
¿Tienes libre está tarde?

Tn:
Totalmente

ShinHoo:
Te recojo a las cuatro

Tn:
Perfecto

Miré la hora en el teléfono; dos y cuarenta y ocho. Tengo tiempo de sobra. Entre a bañarme tranquilamente tarareando una canción. Al salir me vestí con unos jeans y una camiseta rosa con unas letras negras. Terminaba mi maquillaje cuando escuché el timbre.
Abrí la puerta esperando ver a ShinHoo pero en su lugar estaba Taehyung.

— ¿Que quieres?

— ¿Por qué estás tan extraña conmigo? —preguntó entrando al lugar—

— No estoy extraña, estoy ocupada —entré a mi habitación, agarré un bolso metiendo mi móvil, un brillo labial y un poco de dinero—

— ¿Dónde vas? —me agarró de el brazo dándome la vuelta cuando intenté pasar por su lado—

— No te interesa

— ¿Pero que cojones te pasa? —sujetó mis hombros pegándome a su torso— Mírame, bonita

Me agarró de la barbilla obligándome a mirarle, estaba a escasos centímetros de mis labios.

— Eres hermosa —pasó su pulgar por mi labio inferior acariciándolo suave—

Se acercó a mis labios besándolos lentamente, agarró mi cintura pegándome a él mientas devoraba mis labios con parsimonia. Me separé rápidamente al escuchar otra vez el sonido del timbre.

Abrí rápidamente encontrándome con un sonriente ShinHoo

—¿Nos vamos? —asentí— Oh, profesor Kim —saludó mirando al susodicho detrás de mí—

— ShinHoo —respondió indiferente—

— Gracias por devolverme mi cartera, profesor —lo jalé sacándolo del apartamento— Nos vemos en clase

Me despedí agarrando la mano de ShinHoo saliendo de la residencia rápidamente.