-Guerrero Herido.- DabiShiga.

Guerrero Herido.2.

Perdón por faltas de ortografía

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Había pasado un mes desde la última vez que el peliceleste había sabido algo de su amado, y dos meses desde que ocurrió ese trágico accidente, dos meses donde nadie había vuelto a ver a la bestia, dos meses donde el mountro no había causado otro desastre.

En el castillo todo se sentía apagado y sin vida, el príncipe Tenko había ignorado al Rey todo el primer mes, después llegó a la conclusión de que el  ignorar a su padre no cambiaría nada, se reconciliaron un poco y gracias a esto, el de ojos rubí se entero por boca de su padre que Touya estaba bien, que este estaba sanando rápido y lo habían ido a llevar a una cueva en la superficie un tanto lejos del territorio central.

En el último mes también se entero que su protector temporal mantenía una relación amorosa con el comandante en jefe de la misión "Ardiente Mar" nombrada de esta forma por los ciudadanos del océano de sur, su pueblo.

El chico trató de hablar en varias ocasiones con el comandante Compress para saber un poco de su pelirrojo, pero este se negaba a darle cualquier tipo de información con dos excusas que repetía siempre:

"El Rey dio la orden de no comentarle nada príncipe."

O también:

"Perdone joven Tenko, pero el dijo que no le comentaramos de su estado actual."

La segunda excusa al principio no la entendía, hasta que analizó bien, y se dio cuenta que lo decía en forma como si Touya le haya dicho que no le dijeran nada, y esto le preocupaba mucho.

Había dejado de comer por un tiempo, pues no se sentía con apetito, había adelgazado mucho, su cara, cuerpo y aleta habían tomado una figura demacrada, sus mejillas se habían esfumado, sus ojos tenían ojeras enormes, sus labios se veían resecos aún con el agua que los rodeaba, sus brazos ahora eran más delgados, en su clavícula se notaba de más sus huesos, su aleta había perdido un poco de brillo, y fuerza, y también se había hecho más delgada.

Estaba preocupado y eso lo estaba consumiendo por completo, Toga trataba de animarlo, muy pocas de las veces lo conseguía, Jin trataba de hacerle su comida favorita pero el chico siempre terminaba negándose a comer un solo bocado, su padre trataba de mantenerlo ocupado, pero siempre se le veía perdido en su mundo, un mundo donde estaban solo el y Touya.

En una ocasion estaba tan perdido que al salir de su habitación choco con uno de los postes que sostenían la estructura del castillo, estos le hicieron un pequeño pero profundo corte en su ojo izquierdo y labio de lado derecho.

Ahora el joven se encontraba en la sala del trono, el chico estaba frente a su padre y él rey sentado viendo a su hijo con tristeza, era lo mismo de todos los días, el joven tratando de convencer a su padre para ver a su amado, todo se veía igual a días anteriores pero hoy cambiaría algo, con tan solo unas palabras.

-Vamos padre, te lo ruego, déjame verlo, no e sabido nada de él desde hace un mes, dijiste que estaba bien, no entiendo, ¿Por qué no me permites verlo?....

-Tenko, de ves de entender que....

-NO! TÚ!! - grito señalando al rey en su trono- TÚ DEBES DE ENTENDER QUE ESTO ME ESTÁ MATANDO, Y NO CREO QUE PUEDA RESISTIR MÁS... YO... yo... Yo solo quiero verlo....- dijo rompiendo en llanto- PERO ERES UNA PERSONA IGUAL DE CRUEL QUE LOS DE LA SUPERFICIE... ERES IGUAL A ELLOS AL NO DEJARME IR A VERLO...
ERES IGUAL A LOS QUE SE LLEVARON A MAMÁ!!!!

La sala quedó en silencio, solo se escuchaban los sollozos y el llanto del menor.

-Tenko... Mi deber como padre es protegerte ante todo y hacerte entender que lo que me pides es imposible por el momento....