Capítulo 16: El Fin Parte 2

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Después de que la llamada terminará, ambos grupos de Jedis que estaba fuera y que eran los que habían luchado contra el emperador y sus fuerzas, pudieron rumbo hacia las coordenadas encontradas para encontrarse en ellas y descubrir lo que sucedía.

-Luke, ya estamos aquí.-Les avisó Ahsoka, por el comunicador de su nave una vez que los tres cazas, se encontraban al lado de ambas naves.

-Bien, entonces entremos y busquemos un sitio donde aterrizar.-Les indicó, el maestro.

Con lo que siguiendo las indicaciones del gran maestro, las cinco naves entraron en la superficie del planeta, donde pudieron ver que se trataba de un planeta que estaba cubierto totalmente por vegetación, lo que complicó que encontran un sitio para poder aterrizar, una vez que lo hicieron y bajaron la rampa se reunieron para poder hablar.

-Creo que deberíamos ir solo nosotros.-Les indicó Ahsoka, mientras sentía una fuerte presencia en el planeta.

-¿Qué es lo que sentís?-Les preguntó Hera, sabiendo que se lo decían por algo serio.

-Ahsoka tiene razón, hay algo que solo había sentido cuando estaba en aquel lugar entre los mundos.-Les avisó Ezra, mientras recordaba aquella travesía por el mundo entre los mundos, cuando consiguió salvar Ahsoka de aquel combate contra Vader.

-Merrin, por favor quédate aquí tú también.-Le pidió Cal, a su compañera, aunque sabía que era poderosa no quería que la pasara nada.

-Está bien Cal Kestis.-Aceptó Merrin.

Después de que Kanan y Ezra se despidieran de sus parejas y de Zeb, siguieron los pasos de los otros cinco Jedis hacía el interior de la jungla, donde después de avanzar unos kilómetros pudieron ver a una mujer en medio del camino, la cual parecía una mujer muy mayor.

-Bien venidos a Abeloth, jóvenes Jedis.-Les saludo la anciana.-Os avisó antes de nada, iros y abandonar este planeta antes de que sea demasiado tarde.-Les avisó, nada más los cinco Jedis se parasen.

-¿De qué hablas?-Preguntó Cal, mientras se preparaba para defenderse si era necesario.

-Ella es un ser muy poderoso, os podría destruir fácilmente.-Les avisó con una pequeña sonrisa.

-¿De quién estás hablando?-Preguntó curioso Ezra.

-Ella fue encerrada aquí por los hijos, pero un desequilibrio en la fuerza la hizo despertar y poder liberarse de su prisión.-Les explicó.

-Entonces debemos detenerla.-Le advirtió Galen, mientras usaba la fuerza para coger su sable de luz, teniendo un mal presentimiento.

-El renacer del emperador, es lo que causo ese desequilibrio.-Comentó Ahsoka.-Pero los hijos de los que habla, murieron hace mucho tiempo.-Dijo recordando, cuando conoció aquellos seres.

-Puede que ellos murieran, pero lo que habían construido con ayuda, seguía funcionando.-Contestó.

-¿De qué habláis?-Les preguntó Mara.

-Veréis, una vez mi maestro, el maestro Kenobi y yo llegamos a Mortis, en el cual vivían unos seres increíbles que eran muy sensibles a la fuerza, cada el hijo era más fuerte en el lado oscuro y la hija en el luminoso, el padre era el único ser que era capaz de controlar las peleas de ambos.-Les explicó.

-Así es, pero ahora ha despertado, y se hará con el control de toda la galaxia.-Les avisó la anciana antes de lanzarse contra los Jedis.

Donde actuando por instinto, Galen activo su sable de luz, donde dando un paso hacia adelante, atravesó el cuerpo de la anciana, la cual en vede de que su cuerpo cayera al suelo, desapareció en el cielo en forma de humo.

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