En donde alluka y tú se conocen desde la infancia, creando un lazo afectivo muy fuerte, lo que provoca tu enamoramiento hacia ella..
Pero
¿Podrás superar las pruebas que te depara el destino con tal de estar con tu amada?
Cuando alluka te contó sobre su enamorado no pudiste evitar soltar lágrimas a montones y sentir un inmenso dolor en tu corazoncito, para tu suerte y que ella no siguiera hablando más sobre el tema, les llamó killua para comer.
Pasaron un rato juntas y t/n tuvo que fingir estar bien para que alluka no sospechara nada. Le había costado tanto aparentar una sonrisa.
Luego de unas cuantas horas, un mayordomo te llevó a tu hogar. Nunca antes habías deseado tanto estar en casa, necesitabas pasar un buen rato a solas para pensar y llorar todo lo que pudieras, también requerías un gran apoyo emocional pero tristemente te lo tenías que dar tu solita, pues no podías contarle a tu madre sobre tus sentimientos.
Y aunque quisieras, porque estando tan necesitada de afecto te refugiarías en los brazos de cualquiera que se te atravesara, tampoco tendrías la oportunidad de expresarle a tu progenitora el sentir de tu dolido corazón. Ella había estado enfermando con frecuencia, así que optó por viajar a otro estado para realizarse unos estudios, estaría bien pues en ese lugar vivía tu tía, te quedabas tranquila a consciencia de aquel dato.
Entraste, te quitaste tu uniforme para posteriormente ducharte, tenías tantas cosas encima que ya se había formado un nudo enorme en la garganta, al terminar de bañarte fuiste a tu cama e intentaste cerrar los ojos, no te interesaba revisar el teléfono o alguna otra cosa que involucrara hablar/ relacionarte con otras personas, el sentimiento de tristeza te invadía completamente, tanto que hasta te quitó las ganas de comer, cosa que tú amabas.
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A la mañana siguiente ibas con unas fachas horribles, el cabello completamente desarreglado y agarrado en una coleta baja, no te habías tomado el tiempo de maquillarte para lucir un poco presentable, mucho menos haber tapado las grandes ojeras que remarcaban en tu imagen haciéndose muy notorias.
T/n no pudo dormir, se la pasó llorando toda la noche pensando en su querida alluka y el hecho de haberla perdido por completo.
–Vaya, vaya, ¿que tragedia ocurrió para que la linda t/n chan se presentara de esta forma?–.
Era hisoka, probablemente tratando de provocarte nuevamente, no tenías ánimos así que no expresaste ni sentiste emoción alguna, no te importaba.
El peli rojo circulaba al mismo paso que el tuyo, te iba siguiendo prácticamente.
– ¿Qué quieres hisoka?, no estoy de humor, y si es por lo de ayer, muchas gracias por el dato, ya me lo sé completo, ahora ve y búrlate en otro lugar que no sea mi cara –.
Dichas esas últimas palabras te echaste a correr, logrando ver cada vez más cerca la institución, te adentraste ya a pasos calmados y de inmediato fuiste a tu respectivo salón.
Alluka ya se encontraba ahí, sacaste tu celular para fijarte en la hora y al parecer ya era un poco tarde, te había extrañado no haber visto ningún profesor dentro. Te dirigiste a tu lugar y soltaste la mochila para sentarte, en esta ocasión no saludaste a la niña que se sentaba frente a ti, quizás era muy descortés de tu parte, pero presentías que si eras tú quien dirigiera la palabra definitivamente terminarías llorando.
