Tonalidades de verde- Morro x Lloyd

🌿Parte 1🌿

Morro abrió lentamente los ojos, no sabía dónde se encontraba, se sentía mareado y aturdido, todo era oscuridad a su alrededor.

Lo último que recordaba... unos ojos verdes, esos ojos que, a pesar de ser de su enemigo, a quien tanto atormentó, le intentaba salvar de la inminente "muerte" que la caída al agua le brindaría.

No debería haber nada después de eso, solo desaparecer. Los fantasmas no pueden morir, ya están muertos... el rencor los ató al mundo de los vivos... un lazo demasiado débil... que el fluir del agua corta.

Sus ojos se empezaron a acostumbrar a la oscuridad.

—Tu viste cómo hizo lo correcto en el último segundo... se sacrificó- Decía una voz.

—Es alguien de corazón oscuro y vil, merece desaparecer- debatía otra voz, más ronca.

—Lo que lo pudría era el rencor... rencor que desapareció lentamente a medida que conoció a la esmeralda-. Morro escuchaba con atención.

—Sigo creyendo que esto no es una buena idea.

—Necesita ayuda, la esmeralda se está rompiendo, ¿qué mejor que llevarle a un viejo amienemigo? El fantasma Jade tiene potencial... solo debe liberarlo.

Morro contenía la respiración (de todos modos no necesitaba respirar) probablemente él era el Jade, y la esmeralda... Lloyd

Sintió como si tuviese pulso y este se acelerara, si estaba entendiendo bien, unas criaturas que apenas podía ver, debatían si devolverlo al mundo humano... si volver a cruzar su camino con el del verdadero ninja verde.

El ninja verde... Lloyd... no podía odiar a ese niño. Después de todo, había estado dentro de su cuerpo, había visto fragmentos de su vida, muchos de ellos desgarradores. Lloyd estaba roto y aún así seguía en pie para ayudar al resto...

La gota que rebalsó el vaso fue verlo intentar salvarlo a pesar de todo. No pudo evitar conmoverse al ver los ojos preocupados del rubio mientras lo sostenía.

No se arrepentía de haber hecho lo correcto... de dejar de hacerle daño a ese chico.

Se sentía malditamente culpable.

Probablemente le había dejado otro trauma a Lloyd cuando lo poseyó.

Estúpido estúpido estúpidamente estúpido

Tan cegado estaba por la ira, que se enfadó con alguien que no tenía la culpa, el rubio no había decidido ser el ninja verde.

—Sé que estás escuchándonos, pequeño fantasma. Te daremos otra oportunidad... pero será la última- dijo la voz ronca.

Morro se quedó inmóvil de la impresión por unos segundos antes de contestar —haré lo correcto esta vez... ya lo verán.

—Más te vale...

—Sé que lo hará—contestó la voz más aguda.- Y no te caigas al agua otra vez!

Estúpida agua

—Ah, y una última cosa, te di una pequeña sorpresa, ya te darás cuenta incluso antes de que desates tu potencial- dijo la voz aguda felizmente

—¿Mi qué?....—Alcanzó a decir Morro, antes de sentir un gran dolor en el pecho.

Su visión se volvió borrosa y el mundo daba vueltas, no sabía dónde estaba y ya se desmayaría... genial

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—¿M-Morro?—Dijo una voz que conocía muy bien

—¿Maestro Wu?—contestó sobándose el pecho y acostumbrándose a la luz de la estancia.-¿Dónde estoy?

-Estás en mi habitación, viejo discípulo... no sé cómo llegaste, estaba meditando y apareciste.

—Oh... irónicamente tiene sentido- Morro se paró, arreglando su cabellera negra.

Miró alrededor, la habitación del hombre de barba blanca no había cambiado el tipo de estética desde que lo conocía.

—C-Creo que sé lo que hago aquí- Dijo en voz baja.— Me dieron otra oportunidad... para hacer lo correcto.

Wu se acarició la barba mientras pensaba.—Interesante... muy interesante— decía.

—¿Podré quedarme?... los ninjas aún deben odiarme... no los culpo

—Lloyd es su líder, pero también a quien cuidan. No son rencorosos... o al menos no tanto si te arrepientes, pero no sé si te perdonarán lo que le hiciste a Lloyd.

—Les causé muchos problemas, ¿cómo me perdonarían?

—Lloyd también fue un gran problema en su momento— dijo Wu con una pequeña sonrisa al recordar a su pequeño sobrino convivir con los ninjas por primera vez.—Yo creo que puedes lograrlo.

—Gracias por no odiarme... Maestro Wu

—Yo también tuve mis equivocaciones... mis arrepentimientos, todos merecemos otra oportunidad, tienes suerte de que la vida te la diera.

—La vida... —Morro se miró, seguía siendo un fantasma, su piel aún era media transparente y de tonos verdosos. Dió un suspiro, por alguna razón la idea de volver a ser humano había llegado a asentarse en una pequeña parte de su cabeza... pero ya era muy tarde.

Unos toques se escucharon en la puerta antes de abrirse— maestro Wu, disculpe interrumpirlo en su meditación pero...

—Lloyd...— Alcanzó a decir Morro

—Morro...— el rubio volvió a cerrar la puerta y se escucharon sus pasos alejándose rápidamente.

—Dale tiempo—dijo Wu—. Debe ser una gran impresión verte nuevamente.

Morro no pudo evitar una mueca triste, probablemente por eso Wu le decía aquello.

Él ya había sido paciente por mucho tiempo muchas veces, su oportunidad era la última y ahora. Estaba decidido a ir a disculparse con Lloyd.

Que los dioses lo amparen para que no lo tiren del barco volador.