"Sigues aquí" Bestia (Más allá del jardín) y tú - PARTE 2

- Capítulo 1 -

Esto era impensable, ya lo había decidido, no la dejaría ir hasta que su forma humana desapareciera, ya había pasado un buen tiempo en este cuerpo, y lo único en lo que le a servido es sentir aquella atracción sexual que no lo dejaba en paz, sino fuese porque reaccionó a tiempo, quien se imaginaría lo que le hubiese ocurrido a esa joven desnuda entre las sábanas,  cada vez que pensaba en sumergirse en la lujuria con ella, recordaba por qué se había marchado de su lado, tener esas emociones y pensamientos era sólo de humanos...y él había dejado de ser uno hace bastante tiempo...¿por qué ahora?

Incluso, esa parte de su existencia fue borrada hace mucho, no podía visualizar ninguna imagen en su cerebro, pero podía recordar esas sensaciones, olores y sonidos que dejó atrás.

- Mierda...-  su manera de expresarse ya no sonaba a como lo haría en su "estado Bestia", era molesto, sin embargo, ¿por qué no la dejaba ir de una vez para que toda esta locura terminara?, era cierto que su padre era ese tal niño Wirth y que sino hubiese sido por él no hubiese dormido por tanto tiempo, pero gracias a ella él había despertado.

- Auch! - se escuchó a lo lejos, era una voz aguda y femenina, sin dudas aquella joven estaba en sus alrededores, por estar sumergido en sus pensamientos no se había percatado que la muchacha avanzó más de lo normal -...rayos...no otra vez...mi brazo...

Su contrario siempre la observaba, nunca dejó de hacerlo, desde lejos por supuesto, no sabía el por qué su cuerpo reaccionaba al estar cerca de ella, era como si su época de apareamiento hubiese llegado, pero no era ningún sucio animal, era llamado la "Bestia", sin embargo, solo una criatura hecha de vegetación y madera.

- Hola!, hay alguien más en este bosque?!, por favor alguien conteste!!!....alguien...por favor...- las lágrimas no tardaron en salir, por fin sentía que había avanzado a un lugar diferente, que habría una persona que podría ayudarla...pero ese no era el caso...otra vez.

A él no le agradaba el hecho de verla sola y triste, era la única que lo hacía sentir..."compasión"...

- Ah...soy tan estupida por creer que algo cambiaría...- se sentó bajo un árbol  - ...papá, mamá, tío Greg, perdónenme..no puedo volver a casa, soy inútil, débil y patética, creía que con una actitud positiva y determinada, podría conseguirlo, ahora, ¿qué más da?, estoy cansada, sólo quiero descansar, no quiero luchar más...buenas noches..los amo...

Poco a poco el bosque comenzó a poseerla, ella sería parte de este, al fin se había rendido, las raíces la envolvían a paso lento, su piel era cada vez más pálida, pronto empezó a nevar, esta situación le resultaba muy familiar, observaba como el alma de la joven se desvanecía lentamente, pronto moriría.

Se acercó a esta y la miró fijamente, ¿sería mejor dejarla aquí a que sufriera su destino? o ¿debía salvarla?, era cierto que él la dejó vivir, pero no era su decisión si ella quería sucumbir a la desesperación, ya había escogido este rumbo, por su parte se hubiese ido en ese mismo instante, sin embargo, quería quedarse hasta el final, por alguna extraña razón, no la dejaría sola esta vez, pronto oscurecía, la linterna al lado de ella aún seguía encendida, a pesar de todo lo ocurrido, la joven había cumplido con su palabra hasta el final, su alma aún seguía ardiendo.

Colocó una de sus manos en el pulso de ella, sus latidos eran muy débiles y lentos, pronto se iría.

- Bestia...- con una lágrima cayendo por su mejilla.