▪︎▪︎𝐒𝐈𝐄𝐌𝐏𝐑𝐄 𝐒𝐄𝐑𝐄 𝐓𝐔 𝐃𝐀𝐃𝐃𝐘▪︎▪︎

★Seventeen★

"Heredero Riddle"

Había pasado otra semana, en las que Venus no paraba de tener contracciones, finalmente llegó el día, marvolo ya nacería, Venus y yo teníamos las maletas listas, iríamos a San mungo, Marvolo ya nacería y estaba muy nervioso, bueno nerviosos, ambos esperábamos ansiosos, Cristy se había quedado en la mansión esperando a que llegáramos, había pasado mucho tiempo desde que Venus entró a el pabellón, me estaba comenzando a preocupar, llegamos a las siete de la mañana, y ya eran las doce del día, se supone que mi hijo ya hubiera dado a luz, estaba impaciente por conocerlo, por verlo y tenerlo conmigo, fui a buscar un café al mostrador, y me encontré a alguien a quien no quería ver, y menos en ese momento...

Abraxas: ¿¡Que haces aquí!? -Yo no le presté atención, y seguí mi camino-

Abraxas: ¡Tom!, Te estoy hablando... -rodé los ojos y le di un sorbo a mi café-

Abraxas: ¡Tom, contesta idiota!

Yo: Que carajos quieres Abraxas

Abraxas: ¡Que haces aquí! Un monstruo como tú no debería estar aquí. Debería de estar en Azkaban. No se cómo te tienen libre

Yo: ¡Cállate! -dije amenazador-

Abraxas: No me voy a callar, eres un monstruo, como tal, deberías estar en Azkaban por hacer lo que hiciste

Yo: Ella está viva, y es mía ahora, está en el pabellón, está embarazada, mi hijo va a nacer. Volvimos a intentarlo, me perdonó y aquí estamos. Somos y seremos pareja te guste o no... -me fui alejando de Abraxas-

Abraxas: Tom de que carajos hablas, ella está -no logré escuchar lo que dijo, ya que había doblado en el pasillo-

Me senté a esperar, quería ver a mi Venus, y futuro heredero, mi Marvolo. Estoy seguro de que será igual que yo y nadie podría negar eso

Salió un doctor del pabellón, uno canoso, y yo me levanté enseguida, necesita preguntar cómo estaba ella

Yo: Doctor ella está bien...

Doctor: Si señor, también su nieto... -felicitó con sinceridad-

Me quedé quieto por unos segundos, y le respondí con sinceridad

Yo: Mire, soy el padre, y viejo su padre repugnante sangre sucia

Entré a la habitación y la vi dándole pecho a nuestro hijo, me acerqué a paso lento, habían más madres alrededor, cuando ya la tuve cerca acaricie el suave rostro de mi hijo y le di un beso a Venus, ella miró y después a marvolo, le dio un beso en la mejilla, el pequeño heredero me golpeó suavemente en la mano cuando intenté acariciarlo, yo le pegué "suavemente" de vuelta, en broma por cierto, enseguida se puso a llorar y Venus me miró furiosa

Yo: Disculpa, el me pegó primero -me excuse-

Venus: La diferencia es que le pegaste fuerte, es un recién nacido ¿¡Eres tonto Thomas!? Además eres bastante grandecito como para saber que no se golpea a un bebé...

Yo: Si, ya entendí... -respondí con la cabeza agachada-

Yo: Puedo cargarlo -dije sonriendo mientras tenía mis brazos abiertos-