▪︎▪︎𝐒𝐈𝐄𝐌𝐏𝐑𝐄 𝐒𝐄𝐑𝐄 𝐓𝐔 𝐃𝐀𝐃𝐃𝐘▪︎▪︎

★Sixteen★

"¿Venus Segunda?"

Habían pasado 3 meses después de ese incidente de la tostada, Venus aceptó quedarse a vivir conmigo en nuestra mansión, ya tenía 8 meses, nuestro bebé ya nacería. Estaba asustado, emocionado porque llegara este momento, el nacimiento de mi pequeño Marvolo. Estábamos en junio de mil novecientos cuarenta y ocho, Venus estaba más cansada de lo normal, su piel era más pálida, su cabello era negro, no me ha dicho el porqué... hace tiempo, cuando según yo, estaba muerta siempre se la pasaba durmiendo, habían veces en las que no la veo en todo el día, y me siento vacío, como si nadie estuviera aquí conmigo...

Yo: Amor, estás aquí -dije saliendo de mi despacho-

Venus: Si, estoy aquí amor, leyendo -sostuvo su gran pancita-

Yo: Amo todo de ti Venus Anderson

Venus: Y yo amo que me hagas feliz...

Me dio un corto beso y luego salió fuera, a recostarse en el pasto de la mansión, en el patio trasero. Yo entré a mi despacho otra vez, tenía miles de cartas, todas ellas eran de mis seguidores, las lancé al suelo, cada una de ellas, todas lejos de mi vista, pero quedó una en el escritorio, era de Abraxas...

La abrí, por curiosidad y esta decía; "Tom no puedo creer que hayas hecho algo así, pensé que la amabas, como según tu decías. Ella no se merecía un tipo como tú, ella era un ángel y tu un puto monstruo, ojalá te hubieras quedado para siempre en ese orfanato, ojalá este mundo nunca hubiera sabido de ti, espero en otra vida ella sea feliz con otra persona, alguien que la ame, que la haga sonreír el resto de su vida. Nadie de tus seguidores han sabido de ti, no parecen preocupados, más bien asustados por el hecho de que allanado sus casas, Walburga, la pequeña loca se casó, yo tengo una hija, llamada Venus, Tiene tan solo un año. Ahora quizás corro el riesgo de que secuestres a mi pequeña hija, aunque no te creo tan capaz, no vivo aquí, en esa estúpida mansión de mis padres. Como sea, espero ella no te odie, conociéndola bien, ella te seguirá amando esté donde esté, espero con toda mi amistad que alguna vez te brinde Tom, te encuentres bien, y alguien te ayude a salir de ese tormento que has de estar viviendo, aunque hayas matado a el único amor verdadero que tuve, y que nunca me correspondió por estar enamorada de un tipo como tú, me despido, Abraxas Malfoy"

Terminé de leer la carta, confundido por las palabras de Abraxas ¿Hija? ¿Venus muerta? Nadie sabe la verdad, ella no está muerta, es preferible que te mantengas alejado, no quiero a su sucia hija cerca mío. De todas formas, me quedé pensando en esa susodicha "Venus", Abraxas está tan obsesionado con Venus que llamó a su hija así, ¡Maldito loco!

Salí a el patio de la mansión y me quedé con Venus toda la tarde, disfrutando de nuestro día, de nuestro amor que se fortalecía cada vez más

[...]

Semanas después de la carta de Abraxas, yo, Tom Riddle estaba limpiando la mesa, ya que a mi linda y tierna Venus se le ocurrió la genial idea de tirar su té, ¿La razón?, porqué según ella, no le di un beso al terminar de comer. Ella se sentó en el sillón y empezó a comer unas galletitas que habían en el estante

Yo: Mi amor por favor, si te di un besito -dije acercándome a ella-

Venus: Cállate -murmuró hablando como niña pequeña-

Yo: Venus, estás embarazada, no te hace bien enojarte por estupideces...

Venus: Tu eres el que me hace enojar -metió una galleta a su boca-

Yo: Porque mejor no metes esto a tu boca -apunté a mi miembro-

Venus: Ay, estupiro...

Yo: ¿Sigues sin poder decir la letra erre? Eres una tonta...

Venus: Tonta tú abuela

Yo: No tengo abuela, la asesine -dije tranquilamente-

Venus: Tonto, eres un egocéntrico, malvado, tonto, estupiro

Yo: Oh, ¿enserio? -dije ahogando una risa-

Venus: Si, de verdad, enserio...

Yo: ¿¡Egocéntrico yo!? Me parece que no soy tu espejo Venus -respondí sonriendo de lado-

Venus: ¿Espejo? No gracias, no me veo tan vieja...

Reí, en realidad para evitar el hecho de que es comentario me molestó, no me veo tan viejo... Caminé hasta el sillón para abrazarla, ella se subió arriba mio y nos dimos un lento y tierno beso.

[...]

Venus: dilo otra vez amor

Yo: Ya no molestes amor...

Venus: Por favor amor, ¡hazlo!

Ella me miró, sonriendo de oreja a oreja, intenté hablarle a Marvolo, generalmente pateaba un poco cuando me escuchaba a mi. Venus se molestó al saber que nuestro hijo llevaría todos y cada uno se mis nombres, Marvolo Thomas Riddle, Anderson, se me olvidaba el Anderson, nada creativo en lo absoluto, pero quería que llevará mi nombre. besé su panza y ella me besó a mi, luego se acercó a mí oído y dijo

Venus: Idiota...

Yo me reí y la volví a besar

Yo: Te amo mucho, inepta...

Yo: Sabes, estoy loco... Pero por ti Venus Anderson. Me tienes loco, tu y cada una de tus facciones, todas las partes de tu cuerpo, tu trasero sobre todo -mordí mi labio-

Venus: Ay Tom, no digas cochinadas delante de Marvolo junior...

Me largué a reír por el apodo, ella no se quedó atrás y siguió riendo, al los pocos minutos después Marvolo dio una pequeña patadita

Yo: Eso mi heredero, así tienes que hacerle a las sangres sucias -celebré con orgullo-

Venus: ¡Tom! -reprochó-

Yo: Bien, perdón...

Venus: Idiota...

Yo: Preciosa...

Venus: Horrendo

Yo: Fea

Venus: Calvo

Yo: ¡No soy calvo!

Venus: Soñé que quedabas calvo y feo...

Yo: Me amarás aún así, con calvicie y del como un muggle

Venus: Sí, aún así te amaría Tom

Yo: Pues yo no a ti, pero allá tú -reí a carcajadas-

Venus: Que pesado eres...

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