𝓕𝓵𝓸𝓻𝓮𝓼 𝓹𝓸𝓻 𝓚𝓪𝓸𝓻𝓾 | 𝓜𝓪𝓽𝓬𝓱𝓪𝓫𝓵𝓸𝓼𝓼𝓸𝓶.

𝐈𝐈𝐈. 𝐍𝐨𝐭𝐡𝐢𝐧𝐠 𝐛𝐮𝐭 𝐭𝐡𝐞 𝐌𝐨𝐨𝐧.

Viendo la ventana, apreciando la belleza de la luna como nunca antes. Veía aquel satélite natural de una manera nostálgica mientras el miedo seguía oprimiendo su pecho. "Debo ignorarlo, nada más..Puede haber una equivocación, Joe..", trataba de pensar que pudieron haberse equivocado, que aquel diagnóstico era de otra persona, que esa radiografía le pertenecia a alguien más. Trataba de fingir que no sabía que llevaba ciertos días tosiendo pétalos de flores. Trataba de convencerse que él no sufría. Trataba de convencerse de que él no tenía nada malo.

Él no tenía nada malo. No sufría ninguna enfermedad. No sufría de un mal de amores. No era nada más que un mal momento.

Se secaba sus lágrimas y sonreía para si mismo y para la Luna, pensando en lo bella que esta era. "Es tan bella como tú..su brillo me recuerda a tus ojos, Kaoru". Pensar en él le hacía feliz, a pesar de que sabía que estaba enfermo y sufría por amarlo, le seguía haciendo feliz esa imagen. La imagen de él.

Y hablando del rey de Roma, Cherry entró en la habitación. Se le veía cansado e irritado, la molestía le brotaba por los poros, para esconder la enorme preocupación que sentía por el moreno.

ㅡ Gorila idiota. ¿Sabes lo que tuve que hacer para traerte aquí? Si vas a presumir, asegurate de no ser tan jodidamente torpe. ㅡ A pesar de su tono de voz tan enojado y molesto, casi demigrante, se podía ver en esos ojos amarillos el miedo y la preocupación, las pequeñas lágrimas acumuladas brillaban de la misma manera que la Luna. ㅡ Ya dime que mierda tienes, así puedo ir a dormir, en vez de ver por cabezas huecas como tú.

Kojiro dejó salir una risa burlona, para finalmente sonreír, viendo a su amigo de la misma manera que veía a su pálida compañera, solo que su expresión era más relajada y como si quisiera burlarse.

ㅡ Ah..Aún tienen que ver que no me haya quebrado nada o algo así. Me tendré que quedar un tiempo, lo bueno es que las enfermeras son lindas. ㅡ No sabía como su voz no tembló por el gran nudo que comenzaba a crearse en su garganta. Sentía que hasta le cortaría la respiración. ㅡ No deberías preocuparte tanto por mi, rata cuatro ojos, eso no es muy de tu estilo. ㅡ Y terminó con un guiño de ojo.

ㅡ Como si me preocuparas, montaña inútil.

Por más que se insultasen, terminaron sonriendose el uno al otro con fraternidad. Uno siendo visto como un compañero y un hermano. Y el otro siendo apreciado como la cosa más bella del universo, como su razón de vivir y la causa de su enfermedad.

ㅡYa ve a descansar, Kaoru, que enojado y cansado te ves más viejo.

ㅡ Y tú deberías dormir, Kojiro, que cada vez te pones más idiota.

Así se despidieron, como si nada pasara. Como si nada atormentace al moreno. Como si no hubiese más que amistad. Como si no hubiesen mentiras y falsas esoeranzas. Como si no hubiese un amor profundo pero destructivo.

Se despidieron, como si la Luna no hubiese sido testigo de como el terror y el miedo bañaban a Kojiro.

Como si la Luna no hubiese sido testigo de como el dolor bañaba al moreno, lo bañaba de la misma forma que su luz.

Lo bañaba por completo.