"–¡¿Como sucedió eso?! ¡Qué malo que eres Kacchan, no dijiste nada!"
"–No seas un dramático Kaminari, aunque estoy sorprendida."
Esas y más preguntas salían de aquel curso, desde el momento en que Katsuki y Shoto salieron del salón tomados de la mano. Además del corto beso que se dieron en mitad del pasillo.
–Joder hermano, ¿En serio ninguno se dió cuenta? -Preguntó Sero, completamente pasmado al ver la sorpresa en sus compañeros.
Porque para él era más que obvio.
–¡¿Lo sabías?! -Mina fue la primera en lanzarse a él.
–Pero si es obvio, ¿No lo vieron? Shoto está enamorado y Bakugo también. Y como el buen amigo que soy, solo tuve que ayudar.
Porque Sero no solo había notado las miraditas que daba el bicolor, también las notó en Katsuki. Y no podía quedarse de brazos cruzados.
Y ahora, viendo a esos dos tan felices, a sus maneras, estando el uno con el otro, sabía que había hecho la mejor decisión de su vida.
FIN
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