Era de los 80 ⇢Taekook⇠

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Eran tan solo las 6 de la tarde, el joven de cabellos marrones se terminaba de poner sus zapatos y dar pequeños retoques en su vestuario negro y elegante, peinando su cabello de lado y asi proseguir a lavarse los dientes, yendo en direcciona a la sala, quienes sus dos hermanos y padres lo esperaban algo impacientes por lo tarde que ya era.

- Disculpen por la demora, es que...

- Luego das explicaciones, debemos irnos ya - Indicó el padre de familia, quien apresuró a todos a salir de la casa enseguida para llegar lo mas rápido a la iglesia.

6:27 llegaron a la iglesia apresurados, o bueno, al menos solo los padres, pues los hijos no estaban tan estresados, o al menos Jungkook no lo estaba, puesto que a él nunca le han interesado estas cosas, aparte que le ponen muchas reglas que la mayoría no cumple, para él es demasiado aburrido el no hacer lo que le gusta solo por creencias de sus padres.

Habían citado a los esposos para llevar a cabo aquel funeral. El padre de aquella iglesia, tristemente había fallecido esta madrugada mientras dormía. Les pidieron amablemente a los señores Jeon que colaboraran a ayudar a repartir la comida para los que fueron a despedir a aquel hombre en el ataúd.

- Jungkook, cariño - habló su madre - lleva a tus hermanos a dentro mientras tu padre y yo repartimos la comida.

- Esta bien, pero quiero ayudarles - pidió.

- Pero antes lleva a tus hermanos dentro, para que estén en la misa - ordenó.

Jungkook solo asintió, llamó a sus hermanos y yendo adentro de la iglesia, dejando a su par de hermanos en una de las bancas del lugar.

- Les diré una cosa a los dos - dijo hablando mientras miraba a sus dos hermanos sentados - Nayeon, no quiero te estés ligando a cada chico se te cruce en el camino - le ordenó para después voltear a ver a su hermano - Changkyun, no quiero que estés arriba de los asientos ni que estés gritando o haciendo escandalo, mis padres no te pegan pero yo si, ¿queda claro a los dos? - los dos hermanos menores asintieron - bueno.

Luego de ver que todo estuviera en orden con el asunto de sus hermanos, se dio la media vuelta dispuesto a salir de la iglesia, pero sin darse cuenta tropezó con otra persona un poco mas alto que él, quien estaba de espaldas. Sin verle mucho, solo se disculpo con un ¨lo siento¨ y se dispuso a irse. De lo que no se dio cuenta Jungkook, que aquella persona se le quedó viendo hasta perderse entre multitud.

Al llegar con sus padres, su padre sacaba los platos, mientras que su madre les echaba comida en ellos para ponerlos en una bandeja. Jungkook se adentro al pequeño local donde estaban ellos para acercarse a su madre y ayudarle a acomodar los platos en aquella bandeja.

- Deja te ayudo mamá - dijo, mientras recibía los platos llenos de comida y los acomodaba - iré a entregar estos, ahora vuelvo por mas - su madre solo asintió.

Continuó a cargar la bandeja con las dos manos, salió del lugar para ir dentro de la iglesia donde estaban todos los presentes. Los platos fueron tomados por varias personas, así fue la rutina durante 7 veces seguidas, puesto que eran muchas personas las cuales habían asistido a aquel funeral. Al regresar de su séptima vuelta que llevaba, volvió a tropezar entre la gente con un chico, al verlo de espaldas, vio que era la misma persona que la primera vez, pero no le tomó importancia y solo se volvió a disculpar.

Este continuó su camino con naturalidad, hasta que en la salida de la iglesia, escuchó que alguien le llamaba, pero no le tomo importancia y siguió caminando hasta donde estaban sus padres y poner los platos servidos en la bandeja,  pero a los pocos segundos, sintió como alguien le tocaba el hombro, a lo cuál el volteó. Abrió un poco sus ojos al ver un hombre de tan bello rostro, ojos color miel, cabello oscuro, piel acanelada, definitivamente muy atractivo ante los ojos de Jungkook. Pero de lo que se percató Jungkook, es que este chico tenia un aura un tanto apagada, como sus ojos rojizos y su rostro triste.