CON ESE IDIOTA, ¡NO!

5. Lo Soñé

Sentí como la plama de su mano se estampó en mi mejilla; no tardé en sentir es sabor metálico de la sangre llenando mi boca.

-¡ES LO ÚNICO QUE TE DIJE QUE HICIERAS!, ¡NO PUEDES HACER BIEN NADA!

-Lo siento, puedo arreglarlo- tenía la vista en el suelo, no podía mirarlo.

Sentí otra bofetada golpearme en la otra mejilla.

-¡SI NO LO HICISTE ANTES, NO LO HARAS AHORA!, Bastardo- aflojó el nudo de su corbata -largate de mi casa, deja tu auto y tus tajetas; a partir de hoy, no recibes nada de mi.

-Padre...

El sólo salió por la puerta azotandola con toda su fuerza.

No pude evitar soltar algunas lágrimas, tiré de mi cabello con rabia; lo había perdido todo, no puede suceder esto, no puede terminar así.

Corrí hacia la de espera de la novia, tiré la puerta; Sook estaba sentada en el gran sillón, llevaba un vestido tipo princesa, de torso semi transparente con diamantes cubriendolo, un velo largo sobre su peinado recogido. Muy bonita.

-Sook, nena, disculpame; no me dejes- tome sus manos pero ella se soltó bruscamente.

-¡Dejame en paz de una maldita vez!, ¡Ya dije que no me casaré contigo!, y lo que hiciste... - mordió su labio inferior para contener las lágrimas -jamás te lo voy a perdonar.

Tiró de su velo y sus joyas arrojandolas al suelo, iba a salir corriendo pero la detuve sujetandola de su antebrazo.

Me arrodillé en frente de ella y tomé sus manos.

-¡Perdoname!, ¡Perdoname!, Sook te amo, no lo hagas, no me dejes.

-Ni siquiera sueltas una puñetera lagrima por todo esto, ¿Porqué soy la más afectada en esta situación? . Pudrete en el maldito infierno, Hwang Hyunjin...

Desperté, mi cuerpo sudaba, todo estaba oscuro, me senté al borde de la cama observando que Sook no estaba al lado mío.

Se desapareció toda la tarde, me quedé dormido esperándola.

Miré mi teléfono "3:00 am". ¿Porqué aún no llega?.

Busque en la sala, por si se había dormido en el sofá como de costumbre, no estaba.

Marque su número demasiadas veces, no contestaba; estaba a punto de poner en marcha el auto cuando...

-Estoy en casa de una amiga, volveré en la mañana- no me dejó ni hablar ya que cortó la llamada.

Me evitó todo el día por ese maldito beso, no significó nada, pero al parecer ella no lo tomó así.

Si no enamoro a Sook lo pierdo todo, maldita sea.

***

-¡¿Cincuenta y siete llamadas perdidas?!, ese chico si es persistente- dijo Mi Rae con mi celular en sus manos.

-No quiero volver a casa, a ese idiota no lo quiero ver, pero ni modo que viva en tu casa por siempre.

-También tienes que ir a la escuela, es difícil que no lo veas, solo olvida lo que pasó.

-La porquería me robo un beso, qué hago maldita sea- patie frenéticamente la sabana que me cubría y me tiré a la cama.

-Necesitas salir más con chicos- la miré con reproche -¿Que?, es cierto, la única manera que te quites esa timidez al afecto de pareja es teniendo pareja.