II

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El día era común igual que los demás, no había ninguna diferencia, esperen claro que la hay, el hecho de que todos aún me odien y que en especial ella ya no quiera hablar conmigo, claro quién querría después de lo que le hice y de cómo la trate, incluso mis amigos me han comenzado a evitar, y vaya traidores que son, después de todo, lo que hice no lo planee solo, cabe mencionar que gran parte de esa estúpida idea fue hecha por mis amigos.

Esta mañana traté de hablarle, hice lo posible, sin embargo, ella no quería escucharme, es más ni siquiera me hizo caso, además de todo llegaron sus amigas a impedirme hablar con ella, y el idiota de su amigo, jamás creí odiar a alguien, sin embargo, él se había ganado mi odio, él y su hermano que no me dejaban siquiera tratar de explicar la situación, sin embargo, no los odiaba tanto como me odiaba a mí mismo, el odio sin duda era distinto, pero al fin de cuentas era odio.

No sé cuánto tiempo más seguiremos así, algunas veces extraño la forma en la que era antes, que digo a veces, siempre, ahora me arrepiento completamente de lo que hice, fui un reverendo idiota, como me gustaría retroceder el tiempo para no hacer caso a esa idea que ahora me parece muy absurda.

Ya han pasado unas semanas, estoy seguro de que pronto será un mes desde que ella no me habla y desde que la gente me odia, como me gustaría regresarle esa linda sonrisa que sin querer me enamoro, y esa mirada tan hermosa que solía tener, adoraba cuando se molestaba porque inflaba sus mejillas en un lindo puchero, y hacía que sus pómulos se tornaran color carmesí, y en cambio ahora lo que recibo es una mira de decepción y profunda tristeza.

Me odio por saber que fui yo el idiota que le quitó su sonrisa y le borro la felicidad que irradiaba, y me odio aún más por saber que gracias a lo que hice el idiota de su mejor amigo la está consolando, y se está aprovechando de esta situación para estar con ella, yo sé que él fue uno de los causantes de que todo saliera mal, y de que ella ya no me hable, estoy seguro de que él lo planeo, de que supo lo que iba a hacer, y también que probablemente se dio cuenta de que me enamoré de ella, y seguro por celos hizo que todo saliera mal.

Pero juro que probaré que no tuve la culpa y que todo lo hizo el idiota de su amigo, y estoy seguro de que sus hermanos saben algo, o por lo menos la novia del hermano de Lea, sé que ella en algún momento estuvo enamorada de él, sin embargo, sé que ese idiota la lastimó, probablemente ella quiera ayudarme.

Te prometo Lea que te regresaré tu sonrisa y tú felicidad, y me encargaré de hacerte feliz y borrar aquellos malos recuerdos, o por lo menos ya no te causare más sufrimiento y dejare que seas feliz con alguien más.

Conseguiré tu perdón y probaré que no fui el culpable de lo que pasó y que el idiota de tu amigo es más culpable que yo y el causante de tu sufrimiento.

¿Cuando aprendí a quererte tanto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora