¿Un Ángel enamorado de un Humano? Esto no puede ser... (UsUk)

Cap. 5: ¡El carbón no se cocina!

Luego de aquel beso ni Alfred ni yo sabíamos que decir, él estaba nervioso y yo por mi parte también lo estaba pero más que nervioso estaba avergonzado.

Después de un rato en un silencio muy… muy incómodo, entramos a la casa mis mejillas estaban ardiendo aun, podría decirse que soy un tomate andante, estaba hundido en mis pensamientos hasta que el sonido que hizo el estómago de Alfred me saco de mis pensamientos.

-Al ¿tienes hambre? Puedo cocinarte algo si quieres, n-no es que quiera darte de comer, solo lo hago porque es malo que estés sin comer –dije cruzándome de brazos, a veces me pregunto si soy muy obvio cuando miento… (N/A: Si Arthur, lo eres xD)

-Es primera vez que me dices Al –respondió sonriendo de una manera picara, a lo cual me sonroje no me había dado cuenta de que lo había llamado así- pero, tratándose de ti –se acercó y susurro en mi oídio con una voz que me pareció bastante seductora… Me estoy volviendo loco- podrías llamarme como quieras… Aunque lo perfecto seria My Love… 

-¡E-eres un completo idiota! –le grite con mi rostro el llamas por así decirlo, y le di un golpe en la cara… aunque creo que no le hizo ni el más mínimo daño 

-HAHAHA! Arthur te ves realmente  adorable cuando te sonrojas así

-Y-ya cállate… Zopenco ¿Quieres que te haga de comer o no?

- Mmm... –se quedó pensando un rato como buscando una respuesta que caiga del cielo- Bien, me arriesgare, hazme de comer –dijo en un tono de burla ¿Qué se cree?

-¿¡Cómo que arriesgarte!? Por si no lo sabes ¡soy muy bueno cocinando! ¡Me leí todos y cada uno de los libros de cocina que habían en el cielo! 

-HAHAHA! Pues sorpréndeme Artie 

-N-no me digas así… idiota –le respondí dirigiéndome a la cocina, ya vera que lo sorprenderé y se arrepentirá de haber insinuado que soy una amenaza cocinando

Alfred POV~

Arthur se fue a la cocina, me pregunto qué clase de ritual satánico hará tratando de cocinar algo, claramente los sonidos que hace no parecen los de alguien normal cocinando.

De repente salió humo negro de la puerta de la cocina, Oh God… no me digan que está haciendo sus Scones, no, no lo creo se supone que no tiene recuerdos así que dudo que recuerde la receta de esas cosas

-¡¡Artie!! ¡Trata de no invocar a ningún demonio en mi cocina! –le grite desde la sala, y casi puedo sentir sus ganas de matarme por ese comentario

-¡no seas idiota! ¡Además casi acabo así que quédate callado por un rato! Y por última vez ¡No me llames Artie! 

Jajaja… la verdad extrañaba tener estas discusiones con el… que haya vuelto a mí de esta manera parece un sueño, algo irreal, un sueño en el que si despertara no podría volver a soportarlo, nose que clase de jugada es esta que nos está haciendo el destino, pero no quiero volver a perderlo. 

Además el beso que nos dimos hace poco se sintió realmente especial, es como si ambos hubiésemos esperado años por esto, a pesar de que sé que Arthur no recuerda lo que le paso, que yo fui su pareja y que hice lo imposible por tratar de salvarlo en ese… maldito día en que lo perdí en manos de unos imbéciles, que él fue y es lo más importante en mi vida, que intente darme por vencido muchas veces al estar sin él, las marcas en mis muñecas dan a entender que soy alguien débil a pesar de todo, que sin el mi vida fue perdiendo el sentido.

-¡Alfred! ¡Siéntate a la mesa que ya está listo! –dijo desde la cocina, cuando estaba perdido en mis recuerdos del pasado, realmente escuchar su voz otra vez me llena de alegría.