La noticia

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Pasaron 2 meses después de que me mude, me costó trabajo convencer a mis padres pero al final aceptaron. Recuerdo que no tuve el valor de despedirme de ti, no tenía caso, tu estabas evitándome y yo tenía que sacarte de mi mente.

Un sábado en la mañana después de que llegue de la universidad llegaste, me sorprendió tanto verte parado en mi puerta que me quede sin habla.

Entraste, comimos, conversamos, vimos películas, nos miramos, nos abrazamos tiernamente por horas y después te fuiste.

Porque demonios te gustaba hacerme sufrir, estabas saliendo de mi mente y volvías como si para ti fuera necesario que pensara en ti.

Después de esa visita volviste a visitarme cada semana, el mismo día, a la misma hora y todo volvía a la normalidad.

Así pasaron 2 meses mas, el semestre estaba por terminar, las vacaciones estaba por llegar y yo estaba a punto de volver a casa, de volver a verte todos los días y entonces hablaste.

- me voy a casar!

Me quede en completo silencio sin siquiera voltear a verte, sin siquiera saber si lo que había escuchado era la verdad, sin siquiera saber si seguía viva.

- vete!

Te conteste sin mirarte, con una voz tan profunda que sentía que me tragaba mi llanto con ella.

Te levantaste del sofá y antes de abrir la puerta te detuviste.

- te quiero...

Te marchaste y todo se fue contigo.

El RecuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora