Recuerdo que mi abuela muchas veces me había dicho que siempre había que darle el puesto al que lo necesitaba, pero estoy segura que no hablaba de este puesto.
Con valor camine hacia la oscura silueta que se alcanzaba a divisar desde la puerta del aula.
Cuando estuve frente a la extraña persona carraspee mi garganta en voz alta a la espera de una respuesta, pero no logre nada.
-oye, no es por ser caprichosa, pero este es mi asiento- dije con cierto tono de molestia esperando nuevamente una respuesta.
Unos ojos negros y dominantes cruzaron su mirada con la mía y puedo jurar que sentí como mi alma caía a mis pies.
Su mirada era profunda, tanto que sentía que podía perderme en sus ojos, era el reflejo de la noche lo que tenía frente a mí.
-¿Que esperas? ¿que me levante y me vaya?- dijo la voz grave del extraño que se encontraba aún sentado en mi silla.
-¿Disculpa? fui amable contigo.- dije con tono arrogante. -Señorita Stain, el extraño a mi lado no quiere moverse de mi puesto. ¿Puede decirle por favor que se coloque en otro sitio?- hable dirigiéndome a la profesora y volteando mi mirada de nuevo hacia el chico quien aún no dejaba de mirarme.
Le di una mirada desafiante antes de que la profesora interrumpiera la guerra de miradas que habíamos iniciado.
-Señorita Bourg, se sentará al lado del estudiante Di Bianco durante el ciclo escolar.- dijo la maestra con seguridad en su voz.
-¡¿Ciclo escolar?!, pero si eso es mucho tiempo- dije con un puchero en mi boca mientras cruzaba los brazos sobre mi pecho.
La profesora se encogió de hombros y llevo su dedo índice a la boca haciendo referencia al silencio.
Mire a Chloe y me hizo una mueca en forma de burla. Sin mas nada que pudiera hacer, me senté al lado del quien ahora sabia era de apellido "Di Bianco".
Lo miré y tenía plasmada una sonrisa victoriosa en su rostro.
-¿Que te parece gracioso?- dije volteando mi asiento en dirección a él.
No hubo respuesta ni movimiento.
-¿No hablas?- Pregunté
Al no ver interés por su parte para responder, decidí voltear mi silla hacia el frente y prestar atención a la clase.
-Que buena plática.- dije con sarcasmo.- La más larga que he tenido en toda mi vida.- bufé.
Pasaron aproximadamente dos horas de clase y él aún no había dicho ni una sola palabra. Así que decidí romper el silencio.
-Me gusta tu hoodie- dije en un susurro. -¿puedo tocarlo?- pregunte con curiosidad mirando su mano decorada con anillos en los dedos los cuales sostenían una pluma en un delicado agarre.
Cómo era de esperarse, no recibí respuesta.
-Entonces eso es un si-. Dije, procediendo a tocar su hoodie sin su permiso.
-Ni se te ocurra tocarme popular-. amenazo sosteniendo mi muñeca marcando sus fríos anillos mientras mantenía su mirada fija en el tablero enfrente de nosotros.
Intente zafar mi muñeca de su agarre, pero el esfuerzo fue en vano.
"Salvada por la campana" así me sentí después de que él soltara mi muñeca al escuchar el estruendoso sonido que indicaba que era hora de salir al receso.
Le dí una mirada de pocos amigos mientras sobaba el lugar donde había estado su mano hace un momento.
Justo en ese instante Chloe me llamó para salir a la cafetería por algo de comer. Cuando dirigí mi vista nuevamente al chico de ojos negros, ya no se encontraba allí.
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Un capítulo un poco desafiante y atrevido, ¿verdad?
Aunque nuestra querida Deia sea una persona tan extrovertida y amable, el nuevo extraño sin nombre la considera una popular arrogante.
¿Que pasará en el siguiente capítulo?
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Un lengüetazo y un abrazo.
Con amor.
AneB & KarlaM
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Amor desde las sombras
Romance¿Alguna vez te has sentido espiado? Pero no ser espiado por acoso, sino por amor. Un amor de polos opuestos, dispuestos a dar todo uno por el otro. Dispuestos a proteger su vida antes que la de si mismos. Dispuestos a cambiar por lo que más quieren...
