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Es mucho más difícil hacer amigos en la universidad (aunque nisiquiera lo intente), pero Jungkook se siente más invisible que nunca.

No hay nadie que lo empuje contra los casilleros o lo humille frente a otros veinte compañeros, pero nadie reconoce su existencia tampoco.

Asiste a clases solo, almuerza solo y evita cualquier tipo de actividad social. Cuando las cosas se ponen muy mal, Jungkook piensa que tal vez la soledad es peor que ser golpeado. Porque al menos entonces, la gente reconoció su existencia, incluso si fue de alguna manera jodida.

Al menos estaba siendo utilizado para algo.

Cada mañana antes de salir del santuario de su apartamento, Jungkook se mira en el espejo del baño y sonríe a su reflejo.

"Estás bien, Jeon Jungkook", se dice a sí mismo "No necesitas a nadie más que a ti mismo" Trata de decirse a sí mismo que es bueno en esto: que el dolor ya no le molesta.

Que no necesita amigos porque la gente siempre se vuelve tan rápida para encenderlo una vez que ven que su taza está medio vacía.

El dolor está bien.

Es familiar.

Viene naturalmente a él.

Está bien.

Jungkook está acostumbrado a esto.

Puede lidiar con estar solo.

Y en su mayor parte, Jungkook piensa que hace un buen trabajo para hacer frente dadas sus circunstancias. Entonces, ¿qué pasa si no está persiguiendo la única cosa en la vida que alguna vez le ha traído alegría? Sus padres están felices y les ha causado suficientes problemas como es.

Jungkook es bueno para hacer frente.

Hasta que no lo esté.

Hasta que está sentado en Starbucks haciendo la tarea, excepto que realmente no está haciendo la tarea porque está demasiado ocupado viendo a un grupo de chicas charlando felizmente a unas cuantas mesas de distancia de él y se siente celoso; una necesidad que se agita en sus entrañas como por favor, prestándome atención.

Siento que estoy desapareciendo.

Pero Jungkook sabe lo que le sucede a chicos como él que no saben cómo cerrar la boca. Sabe morderse la lengua porque sus palabras siempre son un nido de avispas y solo es bueno para herir a otras personas.

Y, sin embargo, una parte de él todavía tiene la audacia de ser egoísta, de querer más.

Jungkook deja pedazos de sí mismo en todas partes y espera que alguien los note y los recoja.

Como cuerdas deshilachadas en la puerta. Como origamis escondidos debajo de su cama. Como sobres rotos, la cicatriz en su mejilla. El lunar debajo de su labio inferior.

A veces se pregunta cómo sería si alguien tratara de recogerlo todo, qué tan profundo se cortaría, pero sabe que no es el tipo de persona por la que alguien quiere sangrar.

A veces chicas como las que están sentadas cerca de Jungkook se le acercan y antes de que puedan decir nada, ya está cerrando.

Chicas guapas con ojos redondos, labios brillantes y cabello suave. Chicas guapas que le preguntan si está soltero o si quiere salir a ver una película, pero todo lo que Jungkook puede hacer es sacudir.

Abre la palma de sus manos y ve la fealdad entre cada pliegue y no puede, no puede.

Siempre dice que no porque si mantiene a la gente alejada no pueden arruinarlo de nuevo.

Ask me to stay (Elipsismo) - KTH&JJK - Completa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora